Siete Días Jumilla recaba las opiniones de la secretaria del Consejo Regulador, de la organización agraria COAG Jumilla, y de las bodegas Viña Elena, Viñas Familia Gil y BSI
Rocío Cruz Gómez
Todavía no ha acabado agosto y la vendimia ya ha comenzado en el término municipal de Jumilla.
La campaña se ha iniciado con la recolección de las variedades blancas y otras más tempranas, entre las que se encuentran la malvasía, la sauvignon y alguna tinta como la syrah. Las semanas más fuertes llegarán a principios de septiembre con la recolección de las uvas tintas que se alargará hasta el mes de octubre, aunque ya se estén recogiendo algunos varietales.
Parámetros óptimos
Varias bodegas de la DOP Jumilla están desde primeros de agosto inmersos en la campaña, ya que las altas temperaturas han propiciado los parámetros deseados para que se vendimie la uva en condiciones muy óptimas. Cabe destacar, en contraposición, que como consecuencia de la sequía extrema que se está viviendo este año, la producción sufrirá una merma en el total de kilos muy importante.
Siete Días ha consultado con los actores implicados directamente en la campaña de la vendimia y ha pulsado la opinión de la secretaria del Consejo Regulador de la DOP Jumilla, Carolina Martínez, el presidente de COAG, Jesús Villaplana, y con los gerentes de varias bodegas DOP.
Consejo Regulador
Carolina Martínez, la secretaria general del Consejo Regulador DOP Jumilla ha informado que se comenzó con la vendimia oficialmente el 1 de agosto en la zona sur de la denominación de origen. Se han cosechado las variedades más tempranas, en concreto las blancas. La vendimia de tinta será a partir de mediados de septiembre con la monastrell.
El problema de la sequía se ha agravado y por ello, “se esperan rendimientos muy bajos por parcelas, en torno al 50% menos de uva respecto a la media e incluso menos”, el motivo se debe a que algunas viñas no han movido la sabia y como consecuencia no hay racimos. Esto ha provocado un crecimiento desigual, “dentro de una misma finca hay grados vegetativos diferentes, lo que es complicado de gestionar”. No obstante, el estado sanitario es bueno y hay ausencia total de plagas.
Carolina Martínez destaca que es un “problema tanto para la parte productora como para la elaboradora”, esta situación desequilibra al sector y puede hacer “que los viticultores se planteen la continuidad de su actividad por la falta de rentabilidad”.
En el pleno que el Consejo Regulador de la DOP Jumilla celebró el 9 de julio se adoptó una medida para suavizar este problema. Se acordó eliminar las tasas de plantaciones inscritas en la DOP, eliminar las tasas en plantaciones en extensivo y reducir al 50% las tasas de las plantaciones en intensivo para aliviar el gasto que se tiene por parte del propio Consejo Regulador.
Coag-Jumilla
Desde Coag-Jumilla, su presidente Jesús Villaplana, ha afirmado que hace unas semanas empezaron a cortar las primeras uvas blancas y recientemente han comenzado con varietales más tempranas como la merlot o syrah. “La campaña va a ser más reducida a causa de la sequedad extrema, y habrá una merma en torno al 70%”, aunque todo depende de la zona y el tipo de terreno. Si se habla de lo que respecta al año pasado, “la merma es del 15%”. Las viñas de regadío también la sufrirán debido al estrés hídrico, “será menos exagerada y estará sobre el 50%”.
En cuanto a la calidad de la uva, Jesús Villaplana señala que “muchas vides han perdido plantas, alrededor del 15%, sin embargo, se está viendo una calidad muy buena, porque se han quedado los frutos pequeños y poco separados, lo que hace que esa calidad aumente”.
Viña Elena
Elena Pacheco, gerente de Bodegas Viña Elena, ha señalado que ya han comenzado con la vendimia de variedades blancas como la macabeo y la malvasía, parcelas jóvenes cuya plantación tiene apenas cinco años. “Su ritmo de maduración es perfecto y, empezar con la recogida ya evita su sobremaduración y ayuda a mantener un perfil fresco y vibrante”. Igualmente han iniciado la cosecha de tintas con la syrah o la garnacha.
Pacheco afirma que “este año hay un poco más de amplitud térmica, lo que hace que el proceso de madurez vaya más lento y mejor”. Sostiene que la bodega está muy pendiente de los parámetros que ofrecen cierto equilibrio e impiden que haya deshidratación, y aun así, la madurez es irregular en suelos compactos y arcillosos, mientras que en los pedregosos y arenosos la vid profundiza raíces”. “A causa de la sequía, la planta está debilitada y produce lo que puede”. La gerente de Viña Elena afirma que “habrá una merma de un 5% menos que el año pasado, la producción se reducirá, pero la calidad será buena”.
Viñas Familia Gil
José María Gimeno, responsable de campo de Viñas Familia Gil, subraya que la campaña se ha adelantado por las altas temperaturas. La bodega comenzó la vendimia a principios de agosto con las variedades más tempranas, entre las que se encuentran la moscatel, el sauvignon y otras variedades blancas. Pronto empezarán con la cosecha de la variedad tempranillo y, las tintas vendrán más tarde.
Por último, el responsable de campo destaca que “todo va con normalidad, la uva presenta calidad y se espera un año excepcional y cumplir las expectativas”.
Bodegas BSI
La directora de Operaciones de BSI, Nieves Sánchez, señala que ya han comenzado a vendimiar las variedades blancas y las más tempranas. Sobre las tintas, se está cosechando alguna varietal, y se empezará con el resto en la primera semana de septiembre.
“Se espera una vendimia más reducida a causa de la sequía, que está perjudicando a los viñedos y que afectará a la cantidad, una situación lamentable”. “Los viñedos de regadío también notan la falta de agua, continúa Sánchez Gómez, que matiza que debido a la gran extensión del término municipal hay una disparidad en las fechas de madurez, y aún con todo ello, se espera una calidad buena y estable”.
