Después de las numerosas reclamaciones, por fin soluciones

22-01

Una vez que se adjudique la obra, la reforma concluirá en tres meses

Han hecho falta varios años, casi cinco, de protestas , quejas, peticiones y casi súplicas, para que por fin el Ayuntamiento de Jumilla se rinda ante la evidencia y decida mejorar el Centro Social El Alpicoz, situado en el conocido Barrio de San Antón.

Se trata de una parte del edificio que en su día se utilizó como Casa de Socorro y que ahora mantiene su actividad sanitaria como Centro de Especialidades Médicas, , pero al no estar ocupado en su totalidad, una parte importante, compuesta por cuatro planta, el Consistorio decidió hace unos 8 años, cederla a colectivos de la localidad para que ubicarán allí su sede. De esta manera, actualmente, son 15 las asociaciones que se reúnen allí, hacen sus actividades o atienden a los usuarios Las hay de toda índole, culturales, sociales, deportivas o económicas y durante los últimos años han venido reclamando obras de arreglos y mantenimientos que ahora ven muy cerca, ya que el Ayuntamiento ha aprobado la memoria de rehabilitación, reconociendo la alcaldesa de Jumilla, Juana Guardiola, que el estado que presentaba era “más que pésimo”, a la vez que ha lamentado que en la anterior legislatura, solo se hicieran actuaciones de urgencia.

El presupuesto para las obras es de 77.441,50 euros y será con cargo a los remanentes de Tesorería del pasado año. La remodelación incluye la rehabilitación de las cubiertas, ya que presenta numerosas filtraciones por falta de tejas, roturas o movimientos de las mismas. Además se sustituirá la fontanería, saneamiento y electricidad, porque según denuncian los colectivos que usan el centro, es antigua, está en mal estado y con falta de potencia. Igualmente, la mayor parte de la red de saneamiento de desagües es original, en un edificio que data del año de mediados del siglo pasado, donde las puertas están en muy mal estado, agrietadas y sin mantenimiento alguno. Existen ventanas originales en las mismas condiciones, y algunas hasta sin cristales.

Reforzar para aprovechar

El proyecto de remodelación también contempla actuar ante la falta de piezas de alicatado en los aseos, barrotes de barandilla de escalera sueltos, alguna manivela o cerradura rota y luminarias fundidas en zonas de uso general. Además, la humedad predomina en algunos espacios, ya que ha habido filtraciones y roturas de redes con agua, por lo que el repintado es más que necesario, tanto en el interior como en la fachada.

A partir de ahora, el siguiente paso es la aprobación del proyecto y la licitación. A continuación se adjudicarán las obras, que tendrán un período de ejecución que se prevé que sea de tres meses, por lo que tras el verano los miembros de la Coral Jumillana Canticorum volverán a cantar sin tener que ver humedades en la pared; el grupo de teatro de Las Encebras podrá encender todas las luces de la sala mientras preparan el próximo estreno; la Asociación Española Contra el Cáncer y la Asociación de Minusválidos de Jumilla Amfiju, harán sus terapias sin temor a que entre todo un vendaval por las ventana; y la Asociación de Vecinos del barrio preparará sus fiestas en un lugar digno y acorde a su trabajo, porque no hay mal que cien años dure, por fin alguien ha sido sensible a sus peticiones y el Centro Social El Alpicoz pasará de ser pésimo a óptimo.