El hijo del primer fallecido por COVID en la Región cuenta su mala experiencia

En nombre de su familia, ha hecho un llamamiento a la responsabilidad

Juan de Dios, es uno de los hijos de Rafael Ruiz Hernández, el hombre de Jumilla que fue el primer fallecido en la Región de Murcia por coronavirus.

En un desgarrador relato, ha contado su ‘mala experiencia’, pidiendo ante todo, “responsabilidad, ya que o nosotros somos conscientes y ponemos remedio o seremos los culpables de todos nuestros males”.

Juan de Dios es el segundo de tres hermanos y ha contado que su padre estaba en el Hospital de Yecla, “no había podido verlo desde el 14 de marzo que decretaron el confinamiento hasta que el día 19 me enteré por los medios de comunicación que había un hombre de 70 años, en el Virgen del Castillo que era de Jumilla y que había dado positivo. Fue entonces cuando llamé al hospital y me confirmaron la mala noticia. Me quedé muy sorprendido sobre todo por las formas en la que me lo habían comunicado”, y prosigue relatando que “el médico me pidió que no subiera a verlo, aunque lo peor fue cuando me aseguró que mi padre moriría en 24 horas y llamé a toda mi familia para informarlos de todo”, dice apenado.

El hijo de Rafael cuenta que “el viernes 20 de marzo, a las tres y cuarto me llamaron del hospital y de comunicaron que mi padre había fallecido. Me trasladé hasta Yecla y me pusieron el traje de protección para poder verlo por última vez. No pude despedirme antes, tan solo ver como descansaba en paz”, lamenta.

Juan de Dios Ruiz, afirma que “quien muere por el COVID-19, “lo hace solo”, y confirma que su familia “está destrozada, sobre al ver como en tan solo 48 horas el bicho, como me dijeron, se ha llevado a mi padre”.

Además, asegura que cuando salió del hospital después de hacerle unas pruebas a él, llamó a la funeraria y “me dijeron que mi padre ya estaba en el cementerio, no pudimos velarlo y le dieron sepultura en soledad, y eso es muy duro”, remarca.

Responsabilidad

El joven jumillano hace un llamamiento a todos para que se “tome en serio el aislamiento, que nadie salga a la calle y que no haya que esperar a que nos toque de cerca para actuar con responsabilidad por nosotros y por todos”.

Juan de Dios define a su padre como un hombre “generoso, alegre, bondadoso y muy amigo de sus amigos”, y ha querido hacer estas declaraciones a modo de homenaje hacia su padre.