Se trata de un término que aparentemente es nuevo, pero que se podría resumir a modo de parábola como que cada cual ponga siempre su particular grano de arena. Y con esa premisa, desde el Grupo de Comunicación Siete Días Jumilla, siendo muy conscientes de la importancia que tiene siempre, pero ahora más que nunca, el remar todos en la misma dirección y ayudarnos unos a otros para conseguir nuestro propio éxito, hace unas semanas que nos decidimos ponernos manos a esta obra y aportar lo que pudiéramos, pero sobre todo, lo que nos propusimos, fue no quedar al margen, no cerrar los ojos, o simplemente mirar hacia otro lado en un momento donde aunque creamos que estamos mal, lo cierto es que lamentablemente hay mucha gente peor, y no sería justo dejar que parte de nuestra sociedad, de nuestras empresas, de nuestros amigos, clientes o conocidos, cayeran al abismo sin ver como los de alrededor se movilizan para poder evitarlo.


Nosotros, Siete Días Jumilla, quizá seamos una gota en el océano, pero ya se sabe lo que se suele decir, y es que hay veces en las una sola gota, logra derramar el vaso, por lo que todo cuenta y todo suma. Por eso, esta semana, a pesar de que como se pueden imaginar, no atravesamos el mejor de los momentos de nuestra historia como empresa, tuvimos muy claro que queríamos estar ahí, arrimando el hombro, ayudar en la medida de nuestras posibilidades y un ‘poquico’ más, y hacer algo de lo que nos sentimos todos tremendamente orgullosos. Un acto sencillo pero de corazón. Humilde pero muy grande para nosotros: Hemos entregado a Cáritas, Cruz Roja y el Centro de Servicios Sociales de Jumilla la cantidad de 600 litros de leche, es decir, 200 a cada uno, para que se reparta según su mejor criterio, entre aquellas familias que lo necesite.
Como les decimos, muy contentos y satisfechos, y ojala otras empresas, muchas de ellas, más pudientes que nosotros, decida unirse a esa responsabilidad que tenemos todos.