La solución ha sido posible gracias a la abstención en bloque de toda la oposición (PSOE, VOX, IU-V) en un pleno extraordinario
Han sido necesarias transferencias de crédito por valor de casi un millón de euros
Gustavo López
El Presupuesto 2024 no empezó con buen pie, y después de superar varios obstáculos como cambios de interventor y cuestión de confianza, entre otros, se publicó en el Boletín Oficial de la Región de Murcia y entró en vigor a principios de este mes, pero al volcarlo en el sistema contable del Ayuntamiento, surgieron los problemas, ya que se detectaron bolsas vinculadas negativas, algo que la ley no permite, así como proyectos de gastos con créditos insuficientes, lo que hizo saltar las alarmas, ya que el Consistorio se quedó sin presupuesto, ni el 2023, ni el 2024 por no poderse aplicar, lo que hacía entrar en un parón técnico que impedía desde el pago de nóminas hasta el resto de compromisos de gasto municipal.
Ante esta situación, el interventor del Ayuntamiento de Jumilla, propuso la celebración de un pleno extraordinario y urgente para aprobar las transferencias de crédito necesarias que dotaran las partidas que se habían quedado negativas o por debajo del crédito necesario, y que todas ascendían a 973.512 €.
Pleno extraordinario
En las intervenciones durante el pleno, la portavoz de IUV-Podemos, Ana López, pidió al equipo de Gobierno “control en las partidas vinculadas, ya que se pueden convertir en una trampa, como ha sido el caso, y también es necesario más control en el gasto, donde hay partidas que triplican la cantidad inicial presupuestada”.
En cuanto al portavoz de Vox, Juan Agustín Carrillo, calificó la situación como “una nueva entrega de una saga de terror que protagoniza Seve González y su equipo de Gobierno”. Además, aseveró que “lo que hoy trae el PP es de una gravedad increíble, ya que es una quiebra económico-técnica en diferido, de lo que son responsables todo el Gobierno local, porque las cosas no pasan porque sí, sino que son fruto de su caos, y ahora vienen a este pleno a que les salvemos los muebles y les tapemos las vergüenzas ya que, si no somos responsables, las consecuencias son gravísimas, al no poder ni siquiera pagar las nóminas”. Carrillo recordó que “en el pleno de presupuestos nos acusaron de paralizar el municipio, y es ahora cuando está en peligro por culpa de su pésima gestión”.
Al día siguiente, Juan Agustín Carrillo, en una comparecencia pidió al concejal de Hacienda, Delfín Blázquez que presentara su dimisión, “ya que debe asumir su responsabilidad cuanto antes, que se marche o que sea la alcaldesa la que lo cese de forma inmediata ante el caos generado en su área”.
En cuanto a la intervención de Juana Guardiola, comenzó poniendo de manifiesto que el primer presupuesto presentado por el PP “es un problema tras otro, que se formalizó muy tarde, se aprobó sin apoyo del pleno y solo gracias a una cuestión de confianza que no apoyó nadie, con un gasto desmesurado y demasiadas partidas superfluas”.
La portavoz socialista destacó que “estas cosas pasan cuando se trata de un presupuesto improvisado”, y acusó al PP de ser el principal culpable de la situación “por su gasto descontrolado. No confiamos en usted”, terminó Guardiola dirigiéndose a la alcaldesa.
Por último, tomó la palabra la alcaldesa, Seve González en nombre del equipo de Gobierno, y desmintió que se trate de una saga de terror como afirmó el portavoz de Vox.
“Como titular está bien, pero es simplemente un error que hay que subsanar”, y se comprometió a reformar de personal el área de Intervención del Ayuntamiento de Jumilla.
La oposición se abstuvo
La oposición al completo se abstuvo en la votación. IUV-Podemos anunció su voto, pero exigió al equipo de Gobierno poner soluciones “para que esta situación no vuelva a darse, como es contratar personal especialista para el departamento económico, controlar el gasto y prescindir de las partidas vinculadas”.
Vox dijo que “la única salida es abstenernos de votar que no, por responsabilidad únicamente”.
Por su parte, Juana Guardiola del PSOE, dijo que “si fuera por su actitud hacia nosotros y por su falta de transparencia, el voto sería un no rotundo, la responsabilidad obliga”. Al final, el PP votó a favor de las transferencias de crédito, mientras que PSOE, VOX e IUV-Podemos se abstuvieron “a pesar de ser malos, malísimos como la alcaldesa se empeña en decir echándonos encima a los colectivos”, coincidieron los grupos de la oposición.