Los cambios hormonales en la mujer, responsables de tantas fluctuaciones anímicas y físicas, también inciden en la salud de las encías. Hay tres momentos claves de la naturaleza femenina en que el trabajo hormonal, junto a una mala higiene bucal, pueden lastimar el tejido periodontal: la pubertad, la menstruación y el embarazo. En todos los casos, se produce una especie de revolución hormonal que sensibiliza las encías frente a las sustancias tóxicas que se acumulan en el tejido gingival, que es el que cubre los dientes por debajo de las encías.
En estas circunstancias, lo más frecuente es que las encías sangren espontáneamente o al pasar el cepillo dental. Otros síntomas son la hinchazón y el enrojecimiento. En casos extremos se pueden perder piezas dentarias, cuando el problema lleva tiempo, no se controla y la infección afecta al hueso y tejido que envuelve al diente.
Durante la pubertad, con el aumento de progesterona y, en menor medida de estrógenos, las encías suelen irritarse con mayor facilidad, hincharse y sangrar cuando quedan restos de alimentos y por acumulación de placa bacteriana.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), los cambios hormonales en la mujer son la principal causa de la pérdida de dientes. Sin embargo, aunque los vaivenes de progesterona y estrógenos predispongan mal a las encías, las compañeras infaltables para que se produzca gingivitis, son las bacterias y toxinas que se acumulan entre el diente y las encías.
Por eso, los odontólogos insisten en que desde la niñez es bueno incorporar el hábito de la higiene bucal con la misma naturalidad con que respiramos.
Durante los ciclos menstruales “se produce un aumento de progesterona y estrógenos en el fluido gingival y, si hay placa bacteriana, la encía responde de manera exagerada con inflamación, edema, color rojo-azulado y sangrado”, explica Lucrecia Villegas, especialista en periodoncia y docente de la Fundación Creo.
Siempre que haya una correcta limpieza dental, los problemas gingivales típicos del período menstrual desaparecen al volver las hormonas a su estado de reposo. La gestación de un bebé es también un ciclo en el que el organismo de la mujer pasa por un sinnúmero de cambios.
Respecto de la salud bucal, es un período de gran aumento de estrógenos y progesterona, en el que la hinchazón, enrojecimiento y sangrado de las encías suelen aparecer entre el segundo y tercer mes y pueden durar hasta el octavo mes.