Multitud de jumillanos salieron a presenciar el desfile de Domingo de Ramos
Jesús, a lomos de la burrica y junto a sus apóstoles, declama la profecía de la destrucción de Jerusalén
M.C.C.Vera
Gracias a la buena temperatura reinante durante la mañana de Domingo de Ramos, la Procesión de las Palmas lució con gran esplendor y ante la mirada de multitud de jumillanos que salieron a la calle a presenciar el desfile.
Bendición de palmas
La bendición de las palmas tuvo lugar previa a la misa celebrada en la Iglesia de San Juan, oficiada por el párroco Jerónimo Hernández y, a partir de ahí, puntualmente a las doce del mediodía, salió la procesión que discurre por la calle Cánovas del Castillo hasta alcanzar la Parroquia Mayor de Santiago.
A lo largo del itinerario, no faltaron distintos arcos y colgaduras colocados por los vecinos y donde Jesús, a lomos de la burrica y acompañado por sus apóstoles, declama la profecía de la destrucción de Jerusalén.
También, y como es casi una tradición, muchas familias aprovechaban estas paradas de Jesús, para fotografiar a sus hijos subidos en la burrica.
Por supuesto, que en esta Procesión de las Palmas no faltaron niños y niñas representando a hebreos, el tercio de Armaos, la banda de CC.TT. Las Lamentaciones, representantes de las hermandades y cofradías de Semana Santa, así como autoridades religiosas y representantes de la corporación jumillana, presididos por la alcaldesa, Seve González.
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