Editorial

En Jumilla se organizan un buen número de actos culturales, festivos, deportivos y sociales. Con esto que digo, no estoy descubriendo nada nuevo, ya que la agenda que en este sentido tiene Jumilla, es sin duda una de las más apretadas que conozco, y de eso hemos hablada ya en muchas ocasiones. Pero lo que sí hay que poner de manifiesto es que, muchas veces, se organizan actividades y eventos en los que se tiene todo en cuenta, hasta el más mínimo detalle, y sin embargo, se descuida algo tan importante como es la promoción y la difusión, y lo que sucede, es que actos de mucho nivel, y de importante coste económico, fracasan debido a esa falta de difusión que provoca que muy poca gente se entere.


Siempre hemos dicho que el éxito o el fracaso de un acto no está en lo bueno o lo malo que sea, que lógicamente esto es muy importante, sino en la cantidad de gente que sea capaz de convocar. En este sentido, se cae en el error de pensar, que con repartir 10 carteles y poner la información en redes sociales, ya está todo hecho, y eso es un notable error, y a las pruebas me remito.
Dicen que lo que no se conoce no existe, y aunque esta sea una frase hecha, aparentemente sencilla, lo cierto es que encierra una verdad absoluta. Ya que no se trata de falta de información, sino de visibilidad.
Cuando se organiza algo, hay que crear la necesidad de no perdérselo, incluso la ansiedad por asistir, y no dejar esto al azar, pensando erróneamente que las redes sociales llegan a todos, porque lo más fácil será pasar desapercibidos y convertirnos en invisibles.