M. Carmen Cañete Vera

La pasada semana, la Cooperativa de Enseñanza Cruz de Piedra vivió un emotivo reconocimiento a los socios fundadores y maestros de este colegio, quienes, tras décadas de entrega y vocación, se jubilan “dejando tras de sí una huella imborrable en generaciones de alumnos”, destacan desde el centro escolar.
El acto, celebrado en el marco del 40 aniversario de Ucoerm, reunió a representantes institucionales, entre ellos el consejero de Educación, diputados regionales y el delegado del Gobierno. También acudieron representantes de cooperativas de enseñanza de toda la Región de Murcia.


Entre los homenajeados se encontraban los profesores Margarita Fernández, María Dolores Gil, Fuensanta Guardiola, Isabel Martínez, Juan Martínez, Teresa Ochando, Antonio Romera, José Luis Soriano y Eduardo Spiteri. “Todos ellos conforman el corazón de una historia que comenzó hace cuatro décadas con un sueño valiente: el de construir un colegio desde cero, con sus manos, con su esfuerzo y, sobre todo, con su profunda vocación de servicio”, subrayan.

“Sois la historia del colegio”

Desde el propio centro dedican unas palabras muy especiales a quienes no solo fundaron la cooperativa de Enseñanza Cruz de Piedra, sino que, “pusieron en marcha un proyecto educativo basado en la cooperación, la humanidad y el compromiso compartido. No solo formáis parte de la historia del colegio Cruz de Piedra: sois la historia del colegio”.
Describen a los homenajeados como mucho más que profesores: “Han sido referentes, líderes, ejemplo, humanidad y entrega. Una generación que supo demostrar que educar va mucho más allá de impartir contenidos: es acompañar, escuchar y construir comunidad”.
La comunidad escolar reconoce hoy “la inmensa contribución de quienes dedicaron su vida a crear un espacio de aprendizaje, respeto y esperanza. Un colegio que no solo forma estudiantes, sino también familias, ciudadanía y valores”.
El colegio, sin lugar a dudas, tiene un objetivo a partir de ahora: “seguir cuidando y protegiendo aquello que ellos sembraron, porque son herederos de ese sueño construido con tanto esfuerzo, porque esa esencia cooperativista y humana instaurada por los fundadores, seguirá marcando el camino del proyecto educativo”.