José Ramón Sánchez. Odontólogo Colegiado nº 797
Con la llegada del buen tiempo mejoran muchos problemas de salud como bronquitis, neumonías, gripes, artritis y artrosis. Sin embargo, los problemas de sequedad bucal pueden verse agravados por el calor.
El aumento de las temperaturas provoca que la boca y la garganta estén más secas de lo habitual durante casi todo el tiempo. El aire acondicionado, puesto a máxima potencia casi perennemente desde mayo hasta septiembre en oficinas, locales de todo tipo y hogares, reseca las mucosas y empeora la situación de las personas con xerostomía. Además, durante las noches calurosas es habitual que las personas con boca seca se despierten cada pocas horas para beber agua, con lo que pueden acarrear durante el día las consecuencias de dormir mal.
Cuando las temperaturas se acercan a los 30 grados centígrados el organismo necesita mayor hidratación. En general, las pérdidas de agua diarias oscilan entre litro y medio y tres litros y medio dependiendo del sexo, temperatura actividad física de cada persona. En verano la pérdida de agua es de un litro más que en invierno.
Las personas con boca seca también acusan la deshidratación y se acentúan los problemas de sequedad bucal.
Por esta razón, hay productos que pueden ser indispensables durante los meses de primavera y verano para aliviar la boca seca.
Además de la rutina diaria de dentífrico y enjuague específicos para boca seca, hay productos «imprescindibles» para la temporada de primavera/verano.
1) Botella de agua
Con el buen tiempo estamos más activos, pasamos más tiempo al aire libre y es posible que necesitemos tener a mano agua para hidratarnos.
2) Productos de menta o caramelos
Existen productos de menta que pueden ser unos pequeños grandes aliados en la lucha contra la boca seca. Lo mismo ocurre con los caramelos con xilitol, sin azúcar y sin ácidos. Son perfectos para tomar después las comidas o de picar entre horas porque el xilitol potencia la producción de saliva, disminuye la acidez de la boca y el sabor mentolado refresca el aliento.
3) Spray bucal
Hay situaciones en la que es imposible acarrear la botella de medio litro y los sprays son unos sustitutos nada desdeñables. Los sprays tienen un tamaño pequeño, alivian inmediatamente la sequedad bucal, estimulan la producción de saliva y sus efectos se prolongan alrededor de media hora.
4) Infusiones con hielo
Sustituir el café, la cerveza, el vino por té con hielo o infusiones con hielo es la forma más saludable de mantener la boca fresca e hidratada.
5) Gel humectante por la noche
Otra recomendación es que cuando llega el calor por las noches se puede utilizar un gel humectante de larga duración. Protege la boca, evita la sensación de ardor e inhibe la proliferación de bacterias en la boca.