Antonio Navarro. Especialista en audífonos.
Centro Auditivo Audiovox
No se es un conductor peor por tener una pérdida de audición. De hecho, es prácticamente lo contrario, según las conclusiones de una tesis doctoral realizada en Suecia.
Esta tesis doctoral sueca indica que los automovilistas con pérdida de audición no corren en ningún caso un mayor riesgo a la hora de conducir que otros conductores. Por lo tanto, no es necesario que a estos conductores se les exija ningún requisito adicional.
El estudio muestra que, en general, las personas con pérdida de audición suelen conducir con mayor precaución, explica Birgitta Thorslund, autora de la tesis e investigadora del Instituto Nacional sueco de Investigaciones en Transporte y Carretera (VTI, siglas en sueco).
Más precaución y atención
Las conclusiones de la tesis doctoral se basan en tres estudios: un cuestionario, un estudio de conducción con simulador y un estudio observacional en conducción real. En cada uno de los estudios, se compara a un conductor con pérdida de audición con un conductor sin pérdida auditiva.
En general, los automovilistas con pérdida de audición eran más precavidos y estaban más atentos.
El estudio de conducción simulada mostraba, entre otras cosas, que los conductores con pérdida auditiva reducían más la velocidad que los conductores normo-oyentes cuando las condiciones del tráfico empeoraban y suponía un mayor desafío para el conductor. En el estudio de conducción real se descubrió que los conductores con pérdida auditiva miraban más los espejos laterales y el retrovisor que los automovilistas sin pérdida auditiva.
La tesis doctoral titulada “Los efectos de la pérdida de audición para la seguridad vial y movilidad”, fue realizada para el Instituto sueco de Investigaciones sobre Discapacidad, IHV (siglas en sueco).
Fuente: Revista Auris, www.auris.nu, diciembre de 2014.