Asistieron los alcaldes o concejales de Agricultura de Hellín, Tobarra, Fuenteálamo, Montealegre, Ontur y Albatana, junto a Jumilla
Sin duda, la Exaltación del Vino es una de las noches más mágicas de cuantas acontecen en Jumilla, y en este 20 aniversario ha vuelto a contar con un abrumador apoyo de la sociedad a todos los niveles, con un total de 1.200 personas. Y es que este año más que nunca el proceso de venta de entradas ha sido ‘visto y no visto’, y se agotaron en pocas horas al realizarse de forma telemática por medio de internet.
El marco como siempre fue incomparable, en el monte Santa Ana, en los jardines Pío XII, lo que deja una magnífica perspectiva desde la que contemplar la ciudad, que queda a los pies. Un lugar único para brindar con y por el vino, el mejor embajador de Jumilla y uno de los principales motores de su economía.
La velada arrancó con un vídeo promocional de las bondades de la ciudad del vino, que dio paso al concejal de Agricultura del Ayuntamiento de Jumilla, Juan Gil Mira, que dio la bienvenida a los asistentes, agradeciendo el apoyo de todos los entes colaboradores con los que cuenta este evento. Además, ensalzó el trabajo de los agricultores, bodegueros y comercializadores. Por último, dio paso al glosador de esta edición, el enólogo jumillano Diego Cutillas. “Hace 20 años, en la primera Fiesta de Exaltación, hice una cata descriptiva de tres vinos. En esta ocasión voy a hacer una cata del paisaje. El paisaje del vino Monastrell”, arrancaba su intervención Diego Cutillas, que continuaba: “El paisaje es el alma de la tierra. Un complejo producto del tiempo, de la evolución geológica, biológica e histórica del lugar, de la herencia de nuestros antepasados, pero también de las generaciones futuras”, explicaba. “Por eso cada persona ve un paisaje diferente, cada uno lo cata a su manera”, concluía. Del mismo modo relacionaba el vino al concepto de placer. “Es algo que debemos buscar en los vinos y en la gastronomía, y un sentimiento que asociamos a música, amistad, un trabajo bien hecho, una caricia, un abrazo, el sexo”.
Cutillas acabó con unos versos de Lorenzo Guardiola: “Dice el vino: Toma un trago y bébeme poco a poco. Ten fe en mí, pues soy el mago que los pesares deshago, en cuanto los labios toco”, y continuó deseando “¡Que todos los poros de nuestro cuerpo rezumen ‘jumillanía, qué nos sintamos orgullosos de haber nacido en esta tierra, abramos nuestras puertas a los avances tecnológicos y pongamos nuestro esfuerzo y entusiasmo en poner el vino de Jumilla donde le corresponde!”, acabando son glosa con un brindis por Jumilla, por sus vinos y sus gentes!
A continuación los asistentes pasaron a degustar los vinos de hasta 21 bodegas de la DO Jumilla participantes, amenizados por la música del grupo Limbotheque, que hizo gala de un amplio repertorio de estilos musicales, como pop, jazz o country. Y ya después de la medianoche fue la alcaldesa de Jumilla, Juana Guardiola, la que invitó a todos a alzar sus copas y brindar por una nueva, y ojalá que buena cosecha. Además, quiso este año compartir el momento con todos los pueblos que forman el territorio de la denominación junto a Jumilla: Hellín, Tobarra, Fuenteálamo, Montealegre, Ontur y Albatana que son de Albacete. Para ello invitó a los alcaldes o concejales de Agricultura de estas poblaciones.
La Exaltación del Vino está organizada por la Concejalía de Agricultura del Ayuntamiento de Jumilla, y agrupa a los estamentos y colectivos relacionados con el vino, como el Consejo Regularor, ACEVIN, FECOAM, la Ruta del Vino, la Federación de Peñas de la Fiesta de la Vendimia, Asociación Murciana de Enólogos, y empresas agroalimentarias. De tal forma, los responsables de las instituciones y organismos hicieron acto de presencia, así como distintas autoridades institucionales junto a la alcaldesa, Juana Guardiola, concejales de todos los grupos municipales, los diputados regionales del PSOE Alfonso Martínez Baños, Virginia Lopo y el portavoz, Diego Conesa.