Ángel Lencina Alonso ha dedicado gran parte de su vida al deporte, sobre todo al duatlón
Tras una primera etapa deportiva sobre las dos ruedas, fue en el duatlón donde Ángel Lencina encontró la horma de su zapato, conquistando seis campeonatos de España, cinco de ellos en la modalidad Cross
Ángel Lencina Alonso lleva inmerso en el mundo del deporte desde que es capaz de recordar. Desde que empezara en su juventud a practicar una de sus pasiones, el tenis, o compitiera en los campeonatos locales de fútbol sala, ha ido incrementando la intensidad de su práctica deportiva con el paso de los años.
El deporte en general, pero su disciplina estrella, el duatlón, en particular, ha sido muy grato con el atleta jumillano, que ha visto su esfuerzo recompensado con multitud de éxitos en las competiciones donde ha hecho acto de presencia. Cinco campeonatos de España de Duatlón Cross consecutivos en los últimos cinco años así lo atestiguan. Impresionante palmarés al que hay que añadir un campeonato de España más en Duatlón, así como un campeonato regional de Triatlón, un deporte en el que también hizo sus pinitos.
El matrimonio entre Lencina y el deporte de alta competición empezó cuando comenzaron a verse las primeras mountaibike por las calles de nuestra tierra, a principio de los ‘80, moda a la que se apuntaría para comenzar a practicar un deporte, que más de 30 años después, todavía sigue brindándole gratificaciones.
Fue al principio de los años 90 cuando el boom del duatlón y el triatlón se hizo latente en España, deportes que despertarían la atención de Ángel Lencina, empezando de esta forma a practicar la carrera a pie, y comprobando que no se le daba nada mal, probablemente debido a su base física a lomos de la bicicleta de montaña, decidiendo de esta forma integrarla en su rutina deportiva.
Acoplando esta nueva disciplina de manera natural, el deportista jumillano empezó a participar en duatlones, evolucionando prueba tras prueba y año tras año hasta convertirse en pentacampeón de España de Duatlón en la modalidad Cross, tiranizando las últimas cinco ediciones del mismo. En el ámbito internacional también ha tenido sus experiencias, concretamente tres, compitiendo en los Campeonatos de Europa de Escocia, Francia y Bélgica. Ángel Lencina destaca de estas citas sobre todo el altísimo nivel con el que se suele encontrar, destacando a los duatletas ingleses de su grupo de edad, resaltándolos como los grandes rivales a batir.
Y si nos ceñimos a esta temporada hay que hablar, desgraciadamente, de la edición de este año de los 101 Kilómetros de Ronda, prueba en la que Ángel Lencina suele competir cada año en su modalidad de duatlón. Una prueba que se le ha resistido hasta el momento, debido a su dificultad por el masivo índice de participación que en cada edición registra, y de la que todavía no ha saboreado las mieles de la victoria.
Parecía que era en esta campaña cuando Lencina conseguiría sacarse esa espina, pero una piedra en su camino hacia la victoria cuando comandaba la prueba le hizo caer de su bicicleta, provocándole lesiones en una costilla y en la clavícula, que dieron al traste con sus posibilidades al obligarle a retirarse.
Cinco semanas después de la prueba de Ronda se celebraba el Campeonato de España de duatlón, que en esta temporada tenía lugar en la ciudad de Pontevedra, cita que había mantenido motivado a Lencina durante todo el año y a la que llegaba en un gran estado de forma.
La caída de Ronda no sólo le costó a Lencina la carrera, sino que también le frustró sus intenciones de asistir al Campeonato del Mundo. Y aunque en un principio creyó que se recuperaría a tiempo, finalmente su costilla le demostró que, desafortunadamente, tendría que esperar otra oportunidad.
Recientemente ya se le ha podido ver compitiendo en los 10 Kilómetros Ciudad de Jumilla o en una de las pruebas del calendario BTT, por lo que su lesión de costilla parece que ya es historia.
Ahora sólo le falta coger ese punto de intensidad que únicamente la competición es capaz de ofrecer, y que provocará que muy pronto Ángel Lencina esté de nuevo dando alegrías al duatlón jumillano.