M.C.C.V.
El pasado domingo, la Asociación de Vecinos del Barrio de San Antón no quiso dejar pasar el día de su patrón y del santo que les da nombre y celebraron una misa en Santiago, con todas las medidas de seguridad que marcan las autoridades sanitarias. También se bendijeron unos rollos de San Antón.
La Eucaristía fue oficiada por el párroco Manuel de La Rosa y a ella asistieron varias decenas de vecinos, entre ellos, los representantes de las fiestas, unas fiestas que este año fueron suspendidas. El presidente de la AAVV Miguel Pérez afirmó que “es todo muy atípico, muy raro y extraño. Se echa de menos el movimiento del barrio, los encuentros, el ruido de los petardos, el deporte, la música y la convivencia de vecinos”.
También informó que en la asociación se siguen moviendo, con venta de lotería y otras acciones. “Todo eso, apunta Miguel Pérez, lo vamos a dedicar a invertirlo en la asociación, entre otras cosas, pretendemos colaborar con la compra de uno de los tubos del órgano de Santiago, así como la compra de un equipo de música y un proyecto que llevábamos arrastrando desde hace tiempo, que es la restauración de la imagen de San Antón”, dijo.