El padre guardián ha sido trasladado desde la Arrixaca hasta el convento franciscano de Orihuela donde continuará con su rehabilitación
Lola Tomás
La festividad de Santa Ana ha traído buenas noticias para el padre guardián del convento Francisco Oliver, que ha sido la de su alta hospitalaria.
Así lo ha confirmado el padre José María Roncero, tras poner al día a este medio sobre la buena evolución del fraile franciscano, ingresado en el Hospital Virgen de la Arrixaca desde el pasado 8 de julio, cuando sufrió un derrame cerebral.
Tras la intervención sufrida para reducir el derrame y estabilizarlo, y que fue satisfactoria, hubo que someterlo a otra pequeña operación para suturar la herida en la cabeza.
Las pruebas a las que está siendo sometido para valorar su estado neurológico y físico arrojan muy buenos resultados, tal y como confirman los informes que emite su neuróloga la doctora Morales y su médico rehabilitador, que no tienen dudas de que la “actitud positiva y siempre predispuesta del franciscano le ayudará a recuperarse muy bien”.
Al cierre de esta edición conocíamos la noticia del alta hospitalaria del padre Oliver, que seguirá con su tratamiento médico y rehabilitador, desde un lugar “más reconfortante”.
El convento de San Francisco en Orihuela acoge al padre Oliver
El padre Francisco Oliver recibía el alta hospitalaria en la jornada de ayer, y según comunica Roncero, éste será trasladado directamente desde La Arrixaca hasta el convento San Francisco en Orihuela, donde ya le ha sido asignada y preparada una habitación. El convento dispone de enfermería las 24 horas del día y se procede de esta manera en todos los casos de enfermedades graves de los frailes.
La idea es continuar allí con su rehabilitación los próximos meses.
