Se recuperaba de un derrame cerebral sufrido en el mes de julio, en el Convento San Francisco de Orihuela
Lola Tomás
A primera hora de la mañana el padre José María Roncero comunicaba el fallecimiento del padre guardián del convento de Santa Ana, Francisco Oliver.
«Lamentamos comunicaros que Oliver ha muerto esta madrugada. Que Dios lo acoja en su seno y le dé la recompensa merecida por todo el bien que ha derramado por su medio en nuestras vidas», señalaba en un comunicado.
El velatorio de su cuerpo se llevará a cabo en el convento de Orihuela, la tarde del domingo 26 de diciembre, a partir de las 16’00 horas. El entierro será el lunes 27 de diciembre a las 11’30 horas, en la iglesia del convento de Orihuela.
La dirección es: Convento de San Francisco, Plaza de San Francisco número 1, Orihuela (Alicante). La sepultura se hará a continuación en el panteón franciscano del cementerio de Orihuela.
«Más adelante, pasada la Navidad, celebraremos un funeral en Jumilla, y ya se indicará fecha, lugar y hora», rezaba el mismo mensaje.
El padre guardián del monasterio de Santa Ana sufrió un grave derrame cerebral a principios del mes de julio, del que se recuperó satisfactoriamente, y fue trasladado desde la Arrixaca al convento de Orihuela donde continuaba con las sesiones de rehabilitación en el propio convento de la ciudad alicantina.
«El Señor nos lo dio, el Señor nos lo quitó. Bendito sea el nombre del Señor ahora y por siempre», eran las palabras del padre José María Roncero, en un mensaje enviado a todos los medios, amigos y familiares de una larga lista de difusión.
Desde Siete Días Jumilla y Siete Días Radio, trasladamos desde aquí nuestro más sentido pésame a toda la comunidad franciscana del Convento de Santa, Orden Seglar y la Orden Provincial.