La talla fue portada a hombros y sin trono a lo largo del recorrido
Mari Carmen Cañete
Por primera vez, la Hermandad del Santo Costado de Cristo realizó el pasado jueves el traslado de su imagen el Cristo de la Expiración, desde la Parroquia Mayor de Santiago hasta su sede. A lo largo del recorrido, la talla portada a hombros, sin trono, estuvo arropada por numerosos hermanos, algunos fundadores, y también por decenas de jumillanos que salieron a la calle a presenciar el cortejo. Igualmente participó la Asociación de Tambores Cristo de la Sangre.
El presidente del Santo Costado, José Tomás, ha valorado este acto “cargado de emoción, contentos con el resultado final y con la intención de que perdure en el tiempo como un acto más de nuestra cofradía”.