Los tendidos eléctricos causantes de las muertes estaban sin protección y son propiedad de una comunidad de regantes
RSD
El juzgado de Instrucción nº 2 de Jumilla ve indicios de delito contra los recursos naturales y el medio ambiente en la muerte de varias aves rapaces, la mayoría protegidas o en peligro de desaparición, a causa presuntamente de unos tendidos eléctricos sin protección propiedad de una comunidad de regantes del municipio, según publica el diario La Opinión. En un auto notificado el pasado mes de marzo, el juez Sergio Gonzalo desestima la petición de la entidad señalada, que pedía el sobreseimiento y archivo de la causa, y subraya que los “hechos revisten apariencia delictiva”.
El caso fue remitido a los Juzgados de Jumilla tras una denuncia de las organizaciones ANSE y Stipa a la Fiscalía de Medio Ambiente, que apreció un posible delito contra el medio ambiente ante la muerte reiterada de aves en unos tendidos eléctricos que carecían de protección.
Así, entre 2020 y 2021 se detectaron los cadáveres de al menos cuatro búhos reales, un ratonero común, dos cernícalos, un águila culebrera y un águila calzada en varios apoyos que suministran energía a la Comunidad de Regantes Cañada de Judío. Los animales se localizaron a los pies de los tendidos o enganchados tanto en el cabezal de la torre como en los postes cruzados del apoyo.
La entidad fue advertida para corregir dichos tendidos
Para el juez, la investigación muestra que “ha quedado indiciariamente acreditados” los hechos denunciados por la Fiscalía. El Ministerio Público señaló que, aunque “se haya producido la adaptación de los apoyos y tendidos de la línea eléctrica con posterioridad a los hechos, no implica la atipicidad o la exención de responsabilidad” de la propietaria. La comunidad de regantes fue advertida para corregir dichos tendidos tras la detección de los primeros cadáveres, pero estas actuaciones no se realizaron tras el aviso.