En clave de sol by Gustavo López

No me estoy refiriendo a la velocidad a la que tenemos que ir cada día si queremos llegar a todo. Tampoco al nombre de ninguna carretera, de esas de las que por aquí en Jumilla la comunidad autónoma arregla poco o nada. A 242, son los días a los que estamos para la celebración de las elecciones municipales y autonómicas que se van a llevar a cabo en mayo del próximo año. Son tan solo ocho meses, un suspiro vamos, pero que, si atendemos al nivel de crispación y mal rollo existente en estos momentos, se pueden hacer eternos, ya que como es previsible y la historia nos tiene acostumbrados, la tensión irá en aumento conforme esa cifra vaya bajando y se vayan desvelando y poniendo cartas sobre la mesa.
En estos momentos, el tablero está vacío, sabemos que hay que jugar, pero como decía, cada cual tiene sus cartas muy bien tapadas, ocultas a sus contrincantes y al resto, pero que habrá que ir conociendo poco a poco detalles que culminen con la decisión que cada cual considere que hay que tomar.


Primero habrá que conocer a los jugadores, algo que en torno a la Navidad se debería saber ya. De hecho, desde el PSOE regional, ya se ha confirmado a todos los actuales alcaldes y alcaldesas como próximos cabezas de lista, algo que deja claro que la Agrupación Socialista de Jumilla ya tiene a su ‘jugadora’ preparada en la mesa.
Por parte del Partido Popular, parece ser que su portavoz y presidenta ha recibido un toque desde su partido en Murcia para hacer un equipo con garantías, ya que, de lo contrario, podría peligrar hasta su puesto, y ya se sabe que cuando los de arriba meten la mano, todo es posible, así que de momento lo tienen todo cogido con pinzas.
Sobre Ciudadanos, que es el tercero con representación en estos momentos en la corporación, todo va a depender de que su portavoz y único concejal en la actualidad, quiera seguir dando el paso adelante, ya que, de lo contrario, tendrían un difícil papelón.
Por último, hay que ver si Podemos e Izquierda Unida presentan candidatura, y si lo van a hacer juntos o por separado. En el caso de Vox, está claro que entrarán en liza, aunque no se sabe si su coordinador será el número 1, y tampoco los que le acompañarán.
En fin, de momento, a seguir rebajando la cifra y para que la espera no se haga muy larga, lo que sí pediría es que se rebajara la tensión, que se trabaje más en positivo, sino las elecciones pueden ser una escabechina.