Jumillanos del Año 2020
Los sectores esenciales que consideró el Gobierno no dejaron de funcionar durante el periodo de confinamiento y gracias a ellos y junto a otros, formaron una gran cadena de distribución que funcionó a la perfección y permitió que la vida pasara, aunque encerrados, sin ningún tipo de carencias.
El trabajo en el campo no puede parar, ni siquiera en los días de fiestas más señalados. Los agricultores, tractoristas y ayudantes, están siempre ahí, bajo las inclemencias del tiempo, sin hora, y solo mirando al cielo y “rezando” para que ningún fenómeno meteorológico eche toda la cosecha a perder.
De todos ellos, depende que cada día en la mesa haya, fruta, verdura, cereales… por lo menos tres veces al día y que la cadena de alimentación siga su curso; que los transportistas puedan recoger la carga, y trasladarla hasta los distribuidores y éstos a su vez a tiendas y supermercados, donde dependientes, vendedores, comerciantes, reponedores y cajeras , se ocupan de que esa cadena no se corte y todos y cada uno de esos alimentos y productos de higiene, lleguen a demanda a todos los domicilios.
Ellos son una parte muy importante en la vida de todos los demás. Son los más esenciales, los más necesarios, los que nos alimentan y nos proporcionan cada día lo más indispensable para seguir viviendo. De manera, que sin personalizar en nadie, aunque cada lector tenga en mente a “esa persona esencial”, nuestra admiración y reconocimiento en este año tan duro y atípico que despedimos es para los trabajadores del campo y los sectores de la industria agroalimentaria que completan la cadena de distribución de todo lo que consumimos. Todos son Jumillanos del Año 2019.