Tras el 2-2 de la ida, los vinícolas están obligados a marcar en el Stadium Gal de Irún

Tras el empate a dos de la ida frente al Real Unión, los vinícolas se lo juegan todo a una carta en el Stadium Gal de Irún. El gol de Boubacar Hanné en el tiempo de añadido sirvió para meter de lleno e insuflar esperanzas a los de Leonel Pontes de cara al partido de vuelta, si bien los dos tantos materializados por los irundarras en el Uva Monastrell otorgan una ligera ventaja al equipo que dirige Alberto Iturralde. De tal forma el Jumilla se verá obligado a anotar en Guipúzcoa, donde solo le vale una victoria o un empate a tres goles o más para certificar su permanencia en Segunda División B por quinta temporada consecutiva. Del mismo modo, unas tablas a dos tantos mandarían la eliminatoria a la prórroga.

Consciente de la necesidad de perforar la portería contraria, Leonel Pontes tiene previsto realizar un planteamiento más ambicioso que el de la ida: “Es un verdadero reto. Si marcamos vamos a crearle muchas dificultades al oponente. El resultado en casa nos obliga a trabajar para ganar el partido, y queremos hacerlo desde el primer minuto”, ha admitido el luso. De tal forma gana enteros la posibilidad de salir de inicio con dos delanteros. Este fue el cambio táctico que Pontes introdujo en el descanso del partido de ida, mejorando el juego y provocando la reacción de su equipo. No obstante este dibujo dejaría más huecos en la medular. Un riesgo que el luso considera que deben correr, dadas las circunstancias.

Pero también habrá que cuidarse del balón aéreo, la mayor arma del Real Unión de Irún en ataque. Así llegó el segundo tanto de los vascos en Jumilla, aunque Leonel Pontes considera que, en ese partido de ida, su equipo fue superior. “Ellos tuvieron dos ocasiones. La del penalti, que a mi juicio no fue, y un centro lateral (que acabó en gol). En balón parado son fuertes y tenemos que estar preparados para eso”, aprecia el técnico blanquiazul.

Un duelo para el que el entrenador portugués va a poder contar con todos sus jugadores. Y es que los blanquiazules van a necesitar todos los recursos que tienen a su disposición para superar este partido de vuelta que el Real Unión pretende disputar en una auténtica olla a presión. Para ello la entidad irundarra permitirá la entrada gratuita al recinto y organizará también diversas actividades previas al encuentro, con la intención de generar un buen ambiente y llenar la mayor parte de una grada en la que tienen cabida más de 6.000 espectadores.

Al margen de la preparación física y técnica, para este duelo cobra especial relevancia el aspecto psicológico. Saber manejar la ansiedad y el temor a un posible descenso será determinante. “Hay jugadores que saben manejarlo mejor que otros. Pero esa ansiedad también la va a tener el rival. En el momento en que la bola empieza a rodar, la ansiedad acaba. Antes sí habrá, y además es normal”, recalca el luso.

Pues todo en juego en esta auténtica final para FC Jumilla y Real Unión de Irún. Unos llorarán de alegría y otros de tristeza, tras la conclusión de este partido de vuelta del ‘play out’. Una circunstancia que también se dará en la otra eliminatoria de permanencia, en la que el Celta de Vigo ‘B’ tratará de mantener la ventaja de 1-0 que obtuvo en la ida frente al Alcoyano, en un partido que se disputará a partir de las 18 horas en la ciudad alicantina.

REAL UNIÓN IRÚN: Irazusta, Etxabeguren, Ekhi, Javi Garrido, Urkizu, Esnaola, Estrada, Jon Ceberio, Sola, Galán, y Obergozo.

FC JUMILLA: Iván, Mario Marín, Leak, Koyo, Migue Marín, Manolo, Manu Miquel, Diego Gregori, Bouba, Carlos Álvarez, y Diego Sánchez.

ÁRBITRO: Muñoz Piedra, Pedro Eugenio (comité madrileño).

ESTADIO: Stadium Gal de Irún, domingo a las 18.30 horas.