Judith Miñano recibió el Cofín de Oro de la Federación de Peñas y en la Colaboración No Peñera se reconoció al Ayuntamiento, y la alcaldesa lo dedicó a todas las corporaciones
Lola Tomás
La Fiesta de la Vendimia ya está muy bien pregonada, aunque no bastaron ni tres minutos pero tampoco tres horas, tan solo un texto impecable, trabajado y escrito desde el alma y el corazón y expresando las emociones más sentidas de su pregonero, Cayetano Herrero González.
El acto comenzaba en el Teatro Vico con una estampa costumbrista sobre la vendimia por parte del grupo Coros y Danzas y unos bailes tradicionales. Tras ellos, el mantenedor, Gustavo López, ofrecía al público una historia, que bien podía ser la del cuento del Niño de las Uvas, y que sirvió de enlace para lo que estaba por llegar.
Pregón
Cayetano Herrero estructuró su pregón en bloques bien diferenciados, la primera parte la centró en su familia, la segunda en su responsabilidad como director del Museo de Etnografía y todo lo relacionado con la vendimia, y por último la historia de la Fiesta que pregonaba.
El inicio del pregón giró en torno a la figura de su madre, Justa González, vendimiadora de un “majuelico” que a su mujer, Tomasa Santos, se le emponderó un poquito. Se dedicaba también a la costura, y dejó para la historia, una camisa confeccionada con tela del “Siglo” que hoy forma parte del uniforme de su peña, La Peña La Alborga.
Herrero pregonó el porqué de la celebración de la Fiesta de la Vendimia, retrocediendo 2.000 años atrás, hasta la antigua Roma, donde ya se celebraba la Vinalia rústica o Vinalia altera, 14 días antes del 1 de septiembre, lo que hoy sería “nuestra fiesta del vino”.
“En Jumilla, tenemos la suficiente entidad para pensar que estas Fiestas del Vino o Vinalia se celebrarían ya en nuestra Villa de Los Cipreses, ya descrita por el Canónigo Lozano en 1779, redescubierta nuevamente por Jerónimo Molina en 1961 y estudiada últimamente por José Miguel Noguera”, señalaba.
Un gran pregón que la 50ª Fiesta de la Vendimia necesitaba y nadie mejor que el primer presidente que tuvo la Federación de Peñas, Cayetano Herrero, para poner en valor una fiesta milenaria y con raices tan profundas y arraigadas, como la propia Villa de los Cipreses.
Reconocimientos
De manera previa al pregón de la Fiesta de la Vendimia, se entregaron los reconocimientos que realiza la Federación de Peñas, entregando el Cofín de Oro a Judith Miñano por su labor y compromiso con el colectivo y la Colaboración No Peñera al Ayuntamiento de Jumilla, que recogía la alcaldesa Seve González y dedicaba a todas las corporaciones que han trabajado por la Fiesta de la Vendimia en todas las legislaturas.
