Con jornadas de más de 10 horas, con salarios bajos y sin contrato

Redacción

La Policía Nacional ha detenido en Jumilla a un hombre de nacionalidad ecuatoriana de 45 años que se dedicaba a explotar laboralmente a ciudadanos extranjeros en el sector agrícola. Se le acusa de delitos contra el derecho de los trabajadores, favorecimiento a la inmigración irregular, tráfico ilegal de mano de obra, usurpación de estado civil y falsedad documental.
La Unidad Contra las Redes de Inmigración Ilegal y Falsedades Documentales (UCRIF) de la Jefatura Superior de Murcia tuvo conocimiento de que al parecer este ciudadano, residente en Jumilla desde hace años, captaba como trabajadores a extranjeros, en su mayoría en situación irregular en España, para trabajar en fincas dedicadas principalmente al cultivo de la vid.

La mayoría de los captados tenían dificultades económicas, se les ofrecía las tareas agrícolas, con jornadas que muchas veces superaban las 10 horas, con bajos salarios, sin contrato, ni alta en la Seguridad Social. A todo ello, se unía el tiempo del traslado a las fincas, para ganar un salario que dependía de los kilos de uva recolectados, y el dinero era pagado en efectivo para eludir cualquier control fiscal.
Los trabajadores eran trasladados hacinados en furgonetas sin ningún tipo de medida de seguridad sanitaria, teniendo incluso que costearse ellos su atuendo y utensilios de trabajo.

La operación continúa abierta

En el operativo se interceptaron dos furgonetas en cuyo interior se trasladaban 15 trabajadores; nueve de estos se encontraban en situación irregular y de los seis restantes, solamente tres estaban dados de alta en la seguridad social.
El jefe de la cuadrilla, que había captado a los trabajadores, les conminaba y aleccionaba para que, en el caso de ser objeto de una inspección de trabajo, hacerse pasar por terceras personas que sí contaban con permiso de residencia y trabajo en España. La investigación policial todavía continúa abierta y no se descartan nuevas inspecciones y detenciones.