Edición limitada de un tinto y un blanco, cuya iniciativa tiene además un carácter solidario. Una idea que surgió a partir de un ingreso en UCI por COVID 19

M.C.C.V.

El grupo de bodegas Viñas Familia Gil no es solo una empresa, es mucho más: Solidaridad, cultura, respeto, esfuerzo y compromiso, entre otros muchos valores que reflejan en cada uno de sus vinos y en cada una de sus iniciativas. Y en estos momentos de crisis sanitaria y económica ponen de relieve más si cabe estos valores y lanzan una edición de un vino muy especial en plena lucha contra la pandemia.

Pero no es la única acción que han desarrollado en estos tiempos difíciles, puesto que vienen colaborando económicamente en la compra de material sanitario y han mostrado apoyo explícito a colectivos culturales, haciendo conciertos, actuaciones y reivindicaciones a través de las redes sociales. Asimismo se han mantenido todos los puestos de trabajo, ya que consideran que “el equipo humano es lo importante, hay que luchar por ellos y después serán ellos lo que tendrán que seguirnos”.

Origen de la iniciativa

Un ingreso en UCI por Covid-19 ha dado pie a una acción solidaria que ensalza el vino como garante del reencuentro entre seres queridos. El grupo de bodegas Viñas Familia Gil (Bodegas Juan Gil, El Nido, Rosario Vera, Atteca, Atalaya, entre otras) lanza una edición de vino muy especial. Se trata de una colaboración con la agencia creativa MONO Madrid y el ilustrador 72kilos y cuyos beneficios irán destinados a la Federación Española de Bancos de Alimentos (FESBAL), que facilita alimentos a más de millón y medio de personas en España.


Una edición limitada de un tinto y un blanco, con una doble finalidad. En primer lugar, según apuntan desde la empresa “busca inyectar un soplo de ánimo y esperanza entre los familiares y amigos de afectados por el coronavirus para intentar enfocar la energía en el momento en que podamos volver a reunirnos y brindar con esa ansiada copa de vino. Adicionalmente, en un momento donde los efectos económicos de esta crisis empiezan a hacer estragos, quiere apoyar a las familias más afectadas mediante la donación de todos los beneficios generados”.
Los vinos cuentan con unas etiquetas diseñadas ad-hoc para el proyecto por el ilustrador 72kilos, dando un mensaje de optimismo. Las botellas permiten a su vez, la personalización de la propia etiqueta del vino, donde poder escribir el nombre de la persona con la que se compartirá ese vino.

Colectivos vulnerables

Desde Viñas Familia Gil no dudaron en participar en esta iniciativa, con tan solo una condición: “Queríamos aprovechar la energía positiva que desprende un proyecto como este, para aportar nuestro granito de arena y apoyar a los colectivos más vulnerables”, señala Miguel Gil. Estos vinos ya están disponibles en el e-commerce de Viñas Familia Gil https://store.gilfamily.es/es/bodegas/vinos-solidarios y también estarán en sus canales habituales de venta.

Proyecto con alma: un vino que refleja sueños y esperanza

La idea surge a partir de una circunstancia familiar muy personal pero que mucha gente está viviendo, como un proyecto personal, explica Jorge Fesser, director general de MONO Madrid. “Tras varias semanas con mi padre ingresado en la UCI, se me ocurrió crear una edición limitada del vino con el que brindaríamos el día que se recuperase. Me parecía algo natural, el soñar con ese momento de celebración y volver a juntarnos y un detalle bonito en el que focalizar mi energía de forma positiva. Fueron cinco largas semanas ingresado en la UCI, pero al final venció. Así, charlando con mi amigo ilustrador Óscar, le fuimos dando forma juntos hasta dar con el diseño final”.
El ilustrador Óscar Alonso, más conocido como 72kilos, además explica su implicación en esta iniciativa: “Los proyectos crecen si colaboramos. Tenemos la suerte de que nuestras casas están conectadas por amistad e internet, facilidades para colaborar. Cuando me llamó Jorge para dibujar las etiquetas de un vino que iba a unir a gente distanciada me sumé al instante. Yo quiero hacer proyectos así siempre. Tienen alma. Y quería que un poco de mi alma se pegara también a esta gran idea”.