El máximo mandatario de la Junta Central, Juan Francisco Martínez, ha escrito una carta. Ahora corresponde a la Junta Permanente tomar una decisión definitiva al respecto
El presidente de la Junta Central de Hermandades, Juan Francisco Martínez, coincidiendo con la Pascua de Resurrección, se ha dirigido a la comunidad nazarena de Jumilla donde les emplaza hasta otoño en una carta cargada de sentimientos. De esta forma, el máximo mandatario de la JCHSS, ha asegurado que “cuando acabe esta pandemia y la situación lo permita, haremos todo lo posible por dar salida a los sentimientos que ahora contenemos. Pongámonos a trabajar ya en una celebración especial en otoño, donde representemos en las calles jumillanas el drama de la Pasión, Muerte de Jesús y el gozo de la Resurrección, donde, aunque de forma extemporánea, procesiones y ciudad se unan en el rito eterno y entrañable de cada primavera. Una representación en la que participe la inmensa mayoría de los jumillanos”. Con estas palabras, Juan Francisco Martínez deja la puerta abierta a la esperanza semansantera de toda una ciudad que deseaba este año poder celebrar la declaración de Fiesta de Interés Turístico Internacional.
Corresponde ahora a la Junta Permanente el dar forma a las distintas ideas que se presenten y poner sobre la mesa un programa de actos así como posibles fechas de celebración. En este sentido, a pesar de que el Vaticano recomendó en su decreto el 14 y 15 de septiembre como posibles días, lo cierto es que al tratarse de lunes y martes, y encima ser el final de la Feria de Murcia con la subida de la Fuensanta incluida, hacen bastante complicado que finalmente se elijan esos dos días. Por ello, el último fin de semana de septiembre o quizá el segundo fin de semana de octubre que coincide con el Pilar que es lunes, podrían ser considerados finalmente por los presidentes de las cofradías.
“Es la primera vez que no estoy en Jumilla durante la Semana Santa”
Juan Francisco Martínez ha asegurado que “por primera vez en mi vida no he estado en Jumilla, no he podido acudir a la llamada de nuestra Semana Grande. Ha sido una Semana Santa a través de los medios de comunicación y redes sociales, de momentos ya vividos, de vídeos y montajes realizados con gran cariño para mantener vivo el espíritu cofrade”.
Igualmente ha remarcado que “Dios nos ha abierto los ojos ante la debilidad humana y la fugacidad de los bienes materiales, y a la vez nos recuerda que la Semana Santa está muy viva. Han sido días tristes de emoción contenida”.
