El Cristo del Perdón se situó en Cánovas del Castillo, a la altura de la Glorieta y ante él desfilaron las imágenes de cada una de las hermandades y cofradías participantes

LOLA TOMÁS

Dos años después de celebrarse el último Vía Crucis de Viernes de Dolores en el marco de la Semana Santa y en 2019, el rezo de Cuaresma tuvo lugar de una manera distinta a cómo se celebraba.


La retransmisión por parte de la 7TV a toda la Región de Murcia, hizo que el transcurso del mismo cambiara su itinerario habitual y la forma de celebrarse como hasta ahora.
De esta manera, el Cristo del Perdón, que presidía el Solemne Vía Crucis del Viernes de Dolores, se situó en la Glorieta y ante él fueron desfilando las distintas imágenes participantes en el mismo, portadas por anderos de sus cofradías respectivas, que hacían un alto ante la imagen del Perdón y dónde se procedía al rezo de las estaciones.


La banda sonora que acompañaba al transcurrir del Vía Crucis fue la que dispuso e interpretó la banda de la Asociación Jumillana de Amigos de la Música.