El acontecimiento contó con la presencia del bailarín Emilio Serrano, la cantante Consz y una inesperada pedida de mano. El artista jumillano unió danza, vino y orgullo en una glosa muy personal.

J.M.Pérez/R.Cruz

Magia, estrellas, cultura, arte, tradición, vino, gastronomía y amor, se unieron en el 25 aniversario de la Exaltación del Vino de Jumilla. El amor le robó un poquito el protagonismo al vino en una velada que iniciaba las Fiestas Patronales. El acontecimiento estuvo marcado por una inesperada y emotiva pedida de mano de Luis Miguel Blázquez a su pareja, la Vendimiadora Mayor, María José Pérez.

Más de 1.000 personas acudieron al evento para degustar la variedad de vinos y gastronomía típica que ofrecían un total de 16 bodegas de la DOP Jumilla, junto a varias empresas agroalimentarias locales. El acto estuvo presidido por la alcaldesa, Seve González, y también contó con la presencia del director general de Deportes, Francisco Sánchez, en representación del Gobierno regional. Seve González aseguró al inicio del acto que “este acontecimiento exalta la cultura, tradiciones y 5.000 años de historia en torno al mundo del vino”.


Los jumillanos presentes levantaron sus copas en el tradicional brindis que realizó en torno a la medianoche la primera autoridad local, y que estuvo acompañado de un castillo de fuegos artificiales. Como detalle novedoso de esta edición, las pulseras que se entregaron a los asistentes para acceder, fueron de carácter solidario puesto que se elaboraron desde el taller de creación de Aspajunide.

Glosa de danza y vino

El encuentro también estuvo protagonizado por la tradicional glosa que este año realizó el bailarín internacional Emilio Serrano, jumillano que hizo una fusión entre la danza y el vino. Considera que “el esfuerzo, el trabajo y el sacrificio de agricultores y bodegueros, es el mismo que realizan los artistas en su labor”. Aseguró que cuando se encuentra fuera de Jumilla y ve una botella de vino con una etiqueta de la DOP Jumilla, siente “orgullo y satisfacción” por la singularidad de su tierra.


Al ritmo del fandango jumillano, la cantante y compositora murciana Consz abrió el acto. Tras este, cantó otros temas de su repertorio.

Siguiendo con las actuaciones, la Banda de Ases fue la encargada de interpretar éxitos de música indie.