En clave de sol by Gustavo López
En la vida, los problemas, o más bien los contratiempos, son inevitables. Todos enfrentamos desafíos, momentos de incertidumbre y situaciones que parecen tener difícil solución. Sin embargo, la forma en que respondemos a estas dificultades puede marcar la diferencia entre quedarnos atrapados en la preocupación o avanzar con confianza. Como bien dicen en “El Rey León” los simpáticos Timón y Pumba: “Hakuna Matata, ningún problema, vive y sé feliz”.
Cuando nos encontramos ante un obstáculo, nuestra primera reacción suele ser la preocupación, algo que no deja de ser lógico, por otra parte. Nos preguntamos: “¿Cómo voy a salir de esta?”. Pero si adoptamos la filosofía de Hakuna Matata, podemos enfocarnos en la solución, en lugar de en el problema. Esta mentalidad no significa ignorar la realidad, sino aprender a afrontarla con serenidad y confianza. La clave está en aceptar que los problemas son parte de la vida, pero no deben interponerse delante de nuestras ilusiones. Cada desafío trae consigo una oportunidad de aprendizaje y crecimiento. Muchas veces, lo que hoy parece un desastre, con el tiempo se convierte en toda una experiencia valiosa que nos hace más fuertes.

Cuántas veces nos hemos encontrado en una situación difícil, pensando que no hay salida, y de repente, las cosas empiezan a mejorar. La paciencia y la perseverancia son fundamentales. A veces, los momentos más oscuros preceden a los días más luminosos. Cada problema tiene una solución, y cada tormenta siempre pasa. Es importante mantener la calma, buscar apoyo y confiar en que, con esfuerzo y actitud positiva, todo puede mejorar.
Hakuna Matata no significa ignorar los problemas, sino afrontarlos y eso es precisamente lo que este año nos pasó con los VIII Premios de la Gastronomía, ya que después de los problemas iniciales de los primeros años, donde no estuvieron todos los que eran, e incluso pensaban que esto sería flor de un solo año, llegó la consolidación de un evento que ni siquiera faltó en el año de pandemia. Y este 2025, con su octava edición ya, parecía que todo iba a ser pan comido, pero no, llegaron los inconvenientes, parecía que los astros se alineaban en nuestra contra, y tuvimos que poner en práctica la famosa frase, algo que ha hecho que este año hayamos tenido la mejor edición de los Premios de la Gastronomía que son un referente local y regional. Gracias a todos los que lo habéis hecho posible.