El consejo de administración, compuesto por todos los miembros de la saga, se disolvió el 7 de agosto

Lola Tomás

José García Carrión ha quedado como nuevo y único administrador de la firma vinícola García-Carrión. Todo ello ha sucedido una vez que la compañía ha disuelto su consejo de administración, de manera que el empresario jumillano, pasa a ser el administrador único de la empresa principal del grupo.


El consejo de administración, compuesto en su totalidad por los miembros de la saga familiar, fue disuelto oficialmente el 7 de agosto, aunque este movimiento fue aprobado en la Junta General Ordinaria de Accionistas celebrada el 26 de junio, donde se dio el visto bueno a las cuentas anuales individuales y al informe de gestión de la sociedad, así como a la gestión durante el ejercicio 2022.
El consejo de administración estaba formado por el propio José García-Carrión como presidente, Rafaela Corujo como vicepresidenta primera y Luciano García-Carrión, hijo de ambos y quinta generación de la saga familiar, como vicepresidente segundo.
En 2021, últimos datos publicados, la compañía aupó sus resultados hasta los 941 millones de euros, frente a los 854 de 2020.

Ocho de sus filiales han ‘desaparecido’

García-Carrión también anunció también en febrero la disolución por absorción de ocho de sus filiales “para concentrar el negocio en un menor número de sociedades y, agilizar la gestión”.
En consecuencia, han desaparecido las empresas afincadas en Jumilla J. García Carrión Energy, Bodegas 1890 SA, la catalana Bodegas Jaume Serra, la castellanoleonesa Viña Arnaiz, las vascas Bodegas Marqués de Carrión y Bodegas y Viñedos Marqués de Carrión, la andaluza Cítricos del Andévalo y la manchega J. García Carrión La Mancha.