Los Jóvenes Cofrades lanzaron una lluvia de pétalos y oropel sobre la imagen

Mari Carmen C.V.

A pesar de los momentos que se viven debido a la crisis sanitaria provocada por el coronavirus, Jumilla no ha querido dejar pasar una fecha tan importante como es el 15 de agosto, Festividad de Nuestra Señora la Virgen de la Asunción, patrona de la ciudad. De esta forma, en la Parroquia Mayor de Santiago se celebró una Solemne Misa por la mañana que estuvo concelebrada por parte de los párrocos de las tres iglesias locales. En la misma se impusieron medallas a los nuevos cofrades e intervino la Coral Jumillana Canticorum.


Por la tarde, se llevó a cabo otra misa y una procesión claustral por el atrio de Santiago, con la imagen de la Virgen y sobre la cual, en el interior de la parroquia, tuvo lugar una lluvia de pétalos y oropel que organizó el colectivo de Jóvenes Cofrades. En la procesión intervino el quinteto Jumilla Brass Quintet.


En ambos actos religiosos, organizados por la Cofradía de la Virgen, se contó con la asistencia de distintos representantes de todos los colectivos festeros que integran la feria, así como otros, entre ellos, cofradías y hermandades, concejales de las tres formaciones políticas con representación en el Ayuntamiento, con la alcaldesa a la cabeza y el subinspector jefe de la Policía Local.


También en los dos actos, se cumplieron estrictamente con las distancias sociales de seguridad y todas las medidas y normas sanitarias marcadas por las autoridades con el fin de evitar contagios por la covid.