Lo que sí descubre es que recibió un golpe en la parte izquierda de la cabeza
La víctima pudo morir por asfixia, por un problema cerebral por lesiones o por un fallo cardíaco
La causa de la muerte del anciano de Jumilla, M.V., cuyo cadáver fue encontrado en una vivienda dos semanas después de su desaparición, es desconocida, según declaraban hace unos días los peritos forenses que realizaron la autopsia.
En el informe señalan que la víctima, que tenía 72 años cuando ocurrieron los hechos, en noviembre de 2015, pudo morir por una asfixia producida al obstruir la lengua las vías respiratorias, por un problema cerebral derivado de las lesiones que presentaba o por un fallo cardíaco. Añaden además que debido al deterioro que presentaban los tejidos de los restos cadavéricos, al llevar muerto dos semanas, no es posible inclinarse por una u otra opción.
Los que sí parece ser que permitió descubrir la autopsia es que recibió un golpe en la zona temporal izquierda con un objeto romo y no con mucha fuerza, ya que no causó fisura ni fractura en el cráneo. Ese golpe, del que se acusa al procesado, para quien el fiscal reclama 15 años de prisión, debió dejar inconsciente al anciano, que cayó al suelo y sufrió otras lesiones al caer.
La agresión -han añadido- debió producirse en el pasillo de la vivienda, cuyo propietario se la había dejado al procesado porque este no tenía domicilio, tras lo que el cuerpo sin vida fue envuelto en una manta y trasladado a un dormitorio próximo.
La vista oral dio comienzo con la declaración de los guardias civiles que realizaron la inspección ocular y que se han referido a los restos de sangre que observaron en la vivienda y a otros extremos de su actuación.
El acusado admitió el golpe pero aseguró haberlo dejado consciente
Al declarar como acusado, el procesado, N.G.G. admitió haberle dado un puñetazo a la víctima, M.V., de la que dijo que lo había insultado en la calle y de camino hacia la casa, pero añadió que al salir él de la vivienda, aquél tenía los ojos abiertos y estaba consciente.
El juicio ha continuado desarrollándose durante esta semana con la declaración de otros peritos.
Como informábamos en la edición anterior, los hechos tuvieron lugar en noviembre de 2015 y el fiscal reclama y solicita una condena para el acusado de 15 años de prisión.