Editorial

Las fechas de Navidad representan cada año un momento muy importante y esperado para el comercio local, ya que a pesar de la pandemia, las crisis, las subidas de los precios y todas las penurias por las que solemos llorar, con el final del año lo solemos hacer por un ojo solo, es decir, que siempre se incrementan las ventas, se preparan los regalos y aunque los bolsillos sufran, se suele encontrar algún que otro apartijo para echarle una mano a Papa Noel y a los Reyes Magos, así como a llenar nuestras mesas por encima de lo normal.


Por todo esto, se convierte en vital que nos concienciemos de que apoyando al comercio local, a la hostelería, las tiendas de barrio de alimentación o las empresas locales en general, lo que estamos haciendo, prácticamente sin darnos cuenta, es fomentar el empleo, ayudar a la economía de nuestro pueblo y revitalizando nuestras calles.
Porque muchas veces nos quejamos de que en Jumilla no hay de esto o de lo otro, pero olvidamos que no todo es cosa del de enfrente y que nosotros tenemos mucho que decifr y sobre todo, que hacer.
Este sábado el Ayuntamiento ha organizado la Fiesta del Comercio y de todos depende que no quede solo en un día, sino que se vaya mucho más allá, y que después nos volquemos con las rebajas, con la llegada de la primavera o la llegada de la Semana Santa.
No se trata de no ir a Murcia, tampoco de repudiar internet, solo es cuestión de prioridades y Jumilla ha de ser lo primero.