Editorial

Una vez más, y coincidiendo con fechas tan señaladas como la Navidad, el Grupo de Comunicación Siete Días Jumilla vuelve a apostar por ediciones especiales que recopilan minuciosamente el programa de actividades preparado para estas semanas. Una iniciativa que, lejos de resultar novedosa, se ha convertido ya en tradición, compromiso y algo esperado a lo que nos encanta corresponder.
No se puede negar el valor documental de estas publicaciones. A lo largo de los años, Siete Días Jumilla ha asumido el papel de narrador de la historia de nuestro pueblo, funcionando casi como una hemeroteca viva donde quedan reflejados actos, celebraciones, nombres y fechas que, de otro modo, podrían caer en el olvido. En ese sentido, nuestra labor como cronista local es incuestionable y forma parte del patrimonio informativo de Jumilla.


La Navidad, como otras fechas señaladas, ofrece una oportunidad única para ir más allá del listado de actos y convertirse en un espacio de reflexión sobre la identidad, las tradiciones y los retos de nuestro municipio. Limitarse a recopilar el programa oficial supone desaprovechar la posibilidad de generar debate, contrastar opiniones y dar voz a quienes a quiénes las expresan desde perspectivas distintas. De ahí que tengamos una cita con los Jumillanos del Año, el concurso “Queridos Reyes Magos…”, los habituales balances o el resumen de las mejores portadas.
En definitiva, Siete Días Jumilla continúa ejerciendo su papel de archivo y narrador, una función necesaria y valiosa. Pero, además, va más allá, para estar siempre junto a los que dan sentido a nuestro trabajo.