La crisis del coronavirus golpea muy fuerte a este sector, que ya lo tenía todo preparado de cara a la nueva estación

Algunas de los empresarios afectados se plantean hacer un ERTE (expediente de regulación temporal de empleo)

La crisis del coronavirus que ha desembocado en la cancelación de la Semana Santa de Jumilla está dejando muy tocado al sector de la hostelería y a los hoteles de la localidad, que ya miraban de reojo la nueva estación y las campañas venideras, las más prósperas del año.

De esta forma, Siete Días Jumilla se ha puesto en contacto con varios empresarios representantes del sector para conocer de primera mano con qué situación se han encontrado tras la llegada del coronavirus a España y el inicio de los protocolos de confinamiento.

En cuanto al personal de su establecimiento ha decidido que por el momento no despide a nadie, “vamos a esperar a conocer las medidas que toma el Gobierno con los autónomos, pero la idea es mantener al personal”.

Ruta del Vino

Sebastián García, presidente de la Ruta del Vino de Jumilla y gerente de Restaurante Casa Sebastián decidió cerrar su establecimiento el pasado sábado “antes incluso de que llegara la circular de la Comunidad Autónoma”. Respecto a la Ruta del Vino, asegura que “todos los asociados son conscientes de la situación y han cerrado sus establecimientos o cancelado las visitas guiadas, algunos trabajan en sus oficinas, o limpiando sus establecimientos, pero el resto de la actividad ha cesado”.

Expectantes con ‘Música entre vinos’

De cara al futuro, en lo más próximo, la Ruta del Vino ya se ha visto obligada a cancelar eventos, como el que tenían previsto realizar en el Museo del Vino el 22 de marzo, ‘Danza entre barricas’. Con respecto al evento principal de la entidad hostelera, ‘Música entre vinos’, Sebastián García asegura que están actuando “con mucha cautela, nuestra idea era que la primera cita del ciclo este año fuera a mediados de mayo, pero ahora no podemos aventurarnos a realizar todos los contratos con grupos musicales, ni hacer las compras pertinentes”. “Es un momento complicado y no sabemos cómo reaccionarán nuestros clientes, incluso una vez hayamos superado este momento más crítico. Es muy difícil saber si la gente estará dispuesta a adquirir entradas para el ciclo este año”, finaliza Sebastián García.

Por su parte, José Arturo Castellanos, gerente de Bar de Vinos La Macarena afirma de que “con las medidas que se han tomado nuestro sector es uno de los más perjudicados, pero hay que llevarlas a rajatabla para curarnos y salir de la situación. No se pueden cuantificar los daños por el momento, no somos conscientes del daño que puede hacer y más en estos meses que son tan prósperos para la hostelería y el turismo, económicamente va a ser un palo duro”. “Nosotros estamos tomando todas las medidas necesarias para cumplir los protocolos que nos dictan desde el Gobierno, y desde ayer estamos ofreciendo un servicio de comidas a domicilio, para todo aquel que esté interesado.

Hoteleros

Los hoteleros también se han visto obligados a detener su actividad por completo, según Jesús Monreal, gerente de Hotel Monreal, “no solo nos afecta la suspensión de la Semana Santa, los decretos tras instaurarse el Estado de Alarma no nos permiten alojar a nuevos clientes que no estuvieran ya hospedados. Esto supone una losa importante para mi empresa, sobre todo por el personal, salarios y seguridad social me suponen más de 10.000 euros”. Ante esta complicada situación, Monreal se plantea solicitar un ERTE (expediente de regulación temporal de empleo), con el que puede despedir a los trabajadores con la  obligación de volver a contratarlos una vez se recupere la normalidad. Del mismo modo Monreal habla sobre la Pastelería Santa Teresa, en la que no se plantea un ERTE, sino que ha hecho una reducción de jornada, para poder atender al público. También informa de que están preparados en caso de que “haya una crisis de contagios en Jumilla, ya que podrían intervenir el hotel para medicalizarlo, ojalá no suceda, pero estamos abiertos a colaborar”. “Va a ser un desastre económico, teníamos varios días el 100% reservado en Semana Santa, pero son muchos los problemas”, finaliza.

Por último, José Luis Cutillas, gerente de Hotel Pío XII también transmite su preocupación con la situación. “Ya hemos recibido muchas cancelaciones, esto es un paro general, no vamos a poder recibir gente esta Semana Santa, pero tampoco a nuestros clientes principales, los trabajadores que se hospedan a diario. Tenemos que quedarnos en casa, para que esto pase cuanto antes”, finaliza Cutillas.