Fue en el marco de unas jornadas estatales celebradas en Jumilla
M.C.C.Vera
En el marco de las jornadas estatales celebradas en Jumilla, representantes del sector agrario de toda España y en especial de la Región de Murcia han reclamado una revisión urgente de la Política Agraria Común (PAC). Las demandas, canalizadas a través de Unión de Uniones, se centran en una triple línea: La retirada de los condicionantes de permanencia en zonas declaradas catastróficas; un reparto justo y territorialmente equilibrado de las ayudas a la cosecha en verde y al arranque de viñedo y una dotación mínima de agua que permita mantener la actividad agraria, frenar el despoblamiento y sostener un legado cultural milenario.

Consideran que “el Altiplano murciano, donde se encuentra la primera viña de Europa en riesgo de desaparecer, sufre desde hace años los efectos de la desertificación, agravados por el cambio climático. La reciente declaración de zona catastrófica tras la grave sequía refuerza la necesidad de adaptar las políticas agrarias a la realidad territorial”. La organización denuncia que “estos compromisos, que obligan a mantener cultivos o prácticas agrícolas durante varios años para poder cobrar las ayudas, resultan inasumibles para muchas explotaciones en zonas afectadas por fenómenos extremos, como es el caso de Jumilla y su entorno”.
Desde la organización reclaman que la PAC deje “de ser una herramienta uniforme centrada solo en el mercado, y se convierta en una política flexible, territorializada y socialmente justa. La situación del viñedo en Jumilla, Yecla o Bullas podría convertirse en un precedente valioso para desarrollar modelos piloto de adaptación al cambio climático aplicables en otras regiones”.