Editorial

Decir que en Jumilla sobra talento, no es descubrir nada. De hecho, muchas han sido las ocasiones en las que hemos presumido en este mismo espacio del gran entramado de colectivos que hay en nuestra localidad, donde colocan la cultura y la creatividad en lo más alto de su actividad diaria. En esta ocasión, no se trata de ningún grupo sino un talento individual pero que ha sido capaz de unir a una ingente cantidad de personas alrededor suyo para dar a luz el cortometraje “Legado”.
El pasado fin de semana, el artista jumillano Miguel Ángel Lozano presentó esta obra que forma parte de su doctorado y que hizo reír, recordar, pensar, llorar, emocionar y vibrar a lo largo de unos 20 minutos en los que hizo viajar a todos con una maestría fuera de lo normal.


Independientemente del argumento que está basado en hechos reales, lo que además destaca sobremanera es el trabajo en equipo, donde miles de manos se tendieron para que tanto la grabación del propio cortometraje como el acto de presentación fueran de un gran nivel, con decenas de detalles. Igualmente, se pone de manifiesto la importancia que tienen para el posterior desarrollo personal de las personas, los años de educación, el colegio, el amor por la cultura, conocer nuestro entorno, nuestras cosas, y trabajar para lograr gente de bien.
Miguel Ángel Lozano fue en el año 2017 Premio Siete Días a la Labor Cultural, y está más que claro que no nos equivocamos en la elección de la persona, pero sí en el año, ya que tiene un largo camino por recorrer que apenas acaba de empezar y del que hablaremos mucho.
“Legado” es una obra que respira jumillanía por los cuatro costados. Enhorabuena a todos los implicados y a los patrocinadores de la causa. Todo un orgullo.