El ‘Fusariam’ mata el césped, pero ya se han tomado las medidas necesiarias
El mal estado que presenta el césped de La Hoya, con numerosas calvas, se debe a un hongo llamado Fusariam, y del que la Concejalía de Deportes tuvo constancia el día 25 de julio. Sin embargo el foco de infección llegó a propagarse por toda la superficie de juego, desplazándose por medio de los tacos de las botas de los futbolistas.
Este hongo, literalmente, mata el césped, provocando la proliferación de insectos, que aprovechan esta circunstancia para incubar sus larvas, lo que agrava el problema. Desde entonces el campo de césped natural de La Hoya se utiliza solo para partidos oficiales, y no para el entrenamiento de los distintos equipos.
Ya se han tomado medidas al respecto, y una vez eliminada la plaga se ha aplicado una turba (sustrato) con la aplicación de turba (sustrato), sobre la que se ha resembrado el césped. La previsión es que dentro de un mes el estado del campo de fútbol sea aceptable.