Siempre se ha dicho que tras la tempestad llega la calma y después de unos días donde el bullicio, la algarabía y la fiesta han estado a la orden del día, pues llegan los últimos días de agosto donde en Jumilla, la gente desaparece, se quitan los escenarios, las luces especiales se apagan, la fuente vuelve a echar agua y todo va volviendo a la normalidad.
La ingente cantidad de actividades se tornan ahora en cierta tranquilidad, pero tampoco se crean, porque la pedanía de la Torre del Rico celebra sus fiestas, el Niño de las Uvas hay que devolverlo a su morada habitual en el convento de Santa Ana, con matavendimia peñera incluida, y la vuelta al cole ya prácticamente está tocando a nuestras puertas, ya que eso de que el colegio empezaba el 15 de septiembre ya pasó a la historia y se ha ido adelantando poco a poco hasta llegar al 6 de septiembre, que es el día fijado para el inicio de las clases este año, al menos en Infantil y en Primaria, aunque Secundaria dé comienzo unas semanas después.
Y si miramos el calendario, y nos adelantamos justo un año, vemos que 2020 es bisiesto, por lo que el 15 de agosto, festividad de la Virgen de la Asunción, patrona de Jumilla, donde entorno a esta fecha se programa la Feria y Fiestas, comprobamos que al año que viene todo llegará más tarde y por lo tanto entre nuestras fechas patronales y la llegada de septiembre, hay muchos menos días, ya que el viernes 14 se inaugurará la feria. Al día siguiente ya será el día grande de la Virgen, y ese primer fin de semana será el 37 Festival Nacional de Folklore y los Moros y Cristianos, comenzando después la Fiesta de la Vendimia y disparando el castillo de fuegos artificiales el día 23, y no el 18 como ha sido en esta pasada edición. Pero como decíamos, la Feria y Fiestas ha acabado, llegado ahora una aparente tranquilidad que se romperá en tan solo unos días.