Cada año, en la edición de Siete Días Jumilla que publicamos tras la Semana Santa, solemos utilizar este editorial para realizar siempre un particular balance del desarrollo de las procesiones. Sin embargo, este año, todo se torna en atípico después de haber vivido una de las peores, por no decir la peor, Semana Santa de nuestra historia. Y pedimos aquí que se nos entienda, ya que al decir la peor, nos referimos obviamente a que los días grandes, la mitad de los actos, nada más y nada menos que cinco procesiones más las manolas, se han tenido que suspender debido a las inclemencias meteorológicas, donde la lluvia ha tirado al traste las ilusiones de los miles de cofrades de nuestro pueblo, así como a la práctica totalidad de jumillanos y visitantes que durante estos días retoman sus raíces sin pensar nunca que pase lo que precisamente ha pasado.

Pero ‘no hay mal que por bien no venga’ y si este episodio de lluvias ha dilapidado por completo las ilusiones y todo un año de trabajo de las 20 cofradías y hermandades jumillanas, lo cierto es que igualmente han sido una bendición de Dios para los agricultores, donde las personas del campo no recuerdan algo parecido, con tantos días de lluvia y caída de forma tan pausada y nada torrencial, calando en la tierra que en estos momentos se encuentra saciada, algo que beneficia ahora y cuyo beneficio va a arrastrarse durante bastantes meses.

Por lo tanto y visto lo visto, a la hora de evaluar esta edición de la Semana de Pasión jumillana, además de realizarla en dos partes claramente diferenciadas por el buen y el mal tiempo, lo que corresponde es ofrecer todo nuestro ánimo a todos y cada uno de los integrantes de las hermandades, máximos representantes y hasta los cofrades más pequeños, emplazándoles al año que viene donde nuestros sentimientos tendrán que vibrar con mucha más fuerza. Igualmente estar al lado de los bares, restaurantes y hosteleros que han visto pasar estos días con mucha menos intensidad, así como a las bandas de música, de dentro y de fuera, que tienen en estas actuaciones una importante inyección económica.

Mucho ánimo a todos y el 2020 está a la vuelta de la esquina.