jose_ramonJosé Ramón Sánchez.

Odontólogo Colegiado nº 797

Los palillos de dientes o también conocidos como «mondadientes», son unos aditamentos muy delgados de madera o de plástico, utilizados para limpiar los restos de comida que hayan quedado en los lados proximales de los dientes y que no se logran eliminar con el cepillado después de las comidas.

Los palillos han existido desde hace miles de años y suele decirse que es la herramienta de limpieza dental más antigua.

Cuando el cepillo de dientes no se había ideado, esta era la manera de higiene dental que se usaba. En la actualidad dichos aditamentos continúan siendo muy populares en muchas culturas; sin embargo, la utilización de palillos no está recomendada por la población odontológica.

No es correcto hacer uso de dichas astillas para limpiar la dentadura ya que, pueden producir cierta abrasión en los cuellos dentales y también lacerar las encías, si el instrumento se rompe y queda alguna parte atascada en la encía, se produciría inflamación, infección y un fuerte dolor en la zona, otro factor desfavorable es que la persona puede inhalar algún pedazo de la madera, teniendo repercusiones negativas en su salud.

39-03

Algunos pacientes que tienen infecciones o fístulas en las encías, suelen explotar la lesión con un palillo para drenar el contenido, esta maniobra solo empeorará la situación por la falta de esterilización y el protocolo inadecuado utilizado.

Lo ideal es acudir a un odontólogo para que resuelva el problema de manera profesional.

La única manera correcta y cien por ciento recomendada por odontólogos para higienizar las partes proximales de los dientes es utilizando el hilo dental y los cepillos interproximales que existen en el mercado, de lo contrario estará dañando sus dientes y encías, lo cual a largo plazo desencadenará sin duda alguna consecuencias irreversibles. Además existen ahora unos palillos de silicona que sustituyen efectivamente a los palillos de madera convencionales, estos nuevos de silicona no dañan la encía y son recomendables para la gente que está acostumbrada a usarlos y quiera seguir haciéndolo sin estropear sus encías. Algunos incluso llevan flúor.