Antonio Navarro. Especialista en audífonos.
Centro Auditivo Fono Audio
Cuando tenemos un pérdida auditiva en los dos oídos, las personas que utilizan dos audífonos comprenden mejor la palabra y siguen una conversación mucho mejor que las personas que solo utilizan uno. Por ello podemos decir:
-Se comprende mejor una conversación en grupo, y en situaciones de ruido.
-Mejora la localización de la fuente sonora en el espacio (¿dónde está la persona me llama o habla, por dónde viene la ambulancia, de dónde viene ese ruido que he oído en la casa…?)
-Con dos audífonos el rango de audición es de 360º, no solo de 180º.
-Mejora el balance del sonido y la calidad sonora. Oímos en estéreo.
-Hay menos distorsión y una mejor reproducción de los sonidos amplificados debido a que se precisa de menos volumen en cada uno de los audífonos.
-Es posible escuchar sonidos desde una mayor distancia (si alguien habla desde otra habitación o asistimos a una conferencia o clase)
-Los sonidos son más fáciles de identificar.
– Estimulamos los dos oídos a la vez y no perdemos la capacidad de volver a oír de forma natural y entender con el oído no adaptado.
Si adaptamos un audífono sólo en un oído, el cerebro recibe información sonora adecuada de ese oído y va anulando el otro.
-Oír con los dos oídos es más placentero y menos fatigoso
-Los sonidos fuertes son mejor tolerados debido a que necesitamos un volumen menor en cada audífono y en consecuencia la amplificación de los sonidos intensos también será menor.
-El consumo de pila se reduce considerablemente con dos audífonos al llevar éstos un volumen menor, por lo que las pilas duran más.
-Si se avería un audífono, al menos podemos oír con el otro.
-Por último, y, por lógica, si tenemos una deficiencia en los dos oídos, debemos corregir los dos.
A nadie se le ocurre llevar sólo un cristal en las gafas o una lentilla porque con eso es suficiente. Si tenemos dos oídos, dos manos, dos riñones, dos pulmones, dos ojos, etc., será porque necesitamos los dos ¡Por algo será!