La pasada semana el titular de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Pesca, Miguel Ángel del Amor, visitó la localidad

Un producto estrella para los operadores murcianos

La Consejería de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca desarrolla en Jumilla una red experimental del cultivo del cerezo en la Región de Murcia que permite decidir qué materiales se deben destacar y cuales incluir en los ensayos experimentales. Esta información supone un ahorro de tiempo y de medios humanos y materiales, al evitar el planteamiento de objetivos ya logrados mediante la experimentación en distintos países donde se cultiva el cerezo.

El titular de la consejería Miguel Ángel del Amor, destacó  en Jumilla que “los principales interesados en esta iniciativa son los agricultores de la zona, ya que se trata de un producto estrella para los operadores murcianos porque sale al mercado el primero y permite ampliar los calendarios de oferta”.

Finca la maestra

Uno de los puntos de la red experimental del cultivo del cerezo está ubicado en la finca ‘La Maestra’, dependiente del Centro Integrado de Formación y Experiencias Agrarias (CIFEA) de Jumilla. Ocupa 2,1 hectáreas de superficie distribuidas en seis parcelas: dos con 4.320 metros cuadrados para las preselecciones obtenidas del programa de Mejora Genética iniciado por el IMIDA en 2006, tres parcelas con 9.900 metros cuadrados donde están plantados los nuevos híbridos procedentes de los cruzamientos realizados en 2016 y una parcela de 7.400 metros cuadrados para la colección de variedades iniciada en 2007 que se ha ido ampliando hasta las 180 variedades que hay actualmente.

El consejero explicó que “esta colección ha permitido conocer el comportamiento en unas condiciones de horas-frío favorables, y ha servido como referencia para contrastar con el comportamiento varietal observado en otras zonas de la extensa red de experimentación en la Región, así como para llevar a cabo los cruzamientos más idóneos para obtener variedades mejor adaptadas a las condiciones climáticas de Murcia”.

En las condiciones mediterráneas cálidas, como las de la Región de Murcia, con inviernos suaves, se ha comprobado que el cultivo del cerezo es una realidad viable si se utilizan portainjertos adecuados a las características particulares de sus suelos, en los que predominan las margas calizas. En dichas condiciones se pueden conseguir producciones tempranas de buena calidad, cuando la demanda del mercado es muy favorable. La superficie dedicada al cultivo de cerezo alcanza las 359 hectáreas. La comarca más importante es el Altiplano y Jumilla es el municipio más representativo.