Gustavo López

A las ocho estaba convocada una concentración de los amigos de Kevin para tributarle su particular homenaje de reconocimiento y recuerdo. Unos minutos antes de la hora marcada, la gente se iba acercando hasta el parking de la piscina cubierta de Jumilla, que queda precisamente a escasos metros del Cuartel de la Guardia Civil y de la Policía Local, donde en la tarde del lunes se produjeron unos graves altercados que terminaron con varios coches patrulla destrozados, así como algunas partes de las dependencias policiales que se ubican en el paseo Lorenzo Guardiola. Fueron alrededor de 300 personas que en su mayoría vestían de color negro como señal de luto.

Pero en esta ocasión todo fue diferente, ya que se pasó de la violencia del día anterior a la calma y al respeto por parte de los concentrados, y que se dedicaron a tributar un homenaje conjunto al joven fallecido en la madrugada del pasado sábado. El acto comenzó con el encendido de velas que formaban un corazón. También se dispusieron otras velas y se esparcieron pétalos. A continuación, Marta Martínez, novia de Kevin, leyó una carta dedicada en su memoria cargada de amor, de sentimientos y emoción, que concluyó con la suelta de gran parte de los asistentes de globos que llenaron el cielo de Jumilla.

Igualmente, otros presentes también leyeron sus respectivas cartas que iban quemando en una hoguera que dispusieron en el centro. La música también fue protagonista, y se pudieron escuchar las canciones que más le gustaban a Kevin.

La normalidad y el buen desarrollo fue la nota predominante y cuando se suscitaba algún mensaje protagonizado por la rabia, enseguida era acallado por la propia Marta.

Destacar que como preventivo, la Guardia Civil había sido reforzada por medio centenar de agentes y la práctica totalidad de miembros de la Policía Local estaban disponibles.

El acto no contó con presencia policial de uniforme.