Pasadas las nueve de la mañana llegaban a los juzgados los dos jóvenes detenidos por el tiroteo ocurrido el pasado sábado en Jumilla. Han estado declarando hasta casi la una del mediodía y finalmente, según su abogado José María Caballero Salinas, el juez ha decretado la prisión comunicada y sin fianza para estas personas. Están acusados de un delito de homicidio en grado de tentativa, un delito de lesiones con objeto peligroso y tenencia ilícita de armas. Escuchamos al abogado José María Caballero Salinas

Según el letrado defensor, los jóvenes han ratificado la declaración que hicieron en su día en la Guardia Civil y ha informado “el fiscal ha entendido que procedía la prisión por posible riesgo de fuga y reiteración en la conducta que pueda atentar contra bienes jurídicos de la víctima y sus allegados”.  

Las líneas de defensa se basan en la versión que estos jóvenes mantienen y que es que ellos acuden allí a hablar después de unos insultos y amenazas que recibió la madre y una vez que llegaron a la calle Greña, donde nada más que viven los presuntos agredidos y toda su familia, y que ellos saben que los presuntos agredidos son cazadores y propietarios de armas, por lo que aseguran que los que fueron recibidos a tiros fueron ellos y, de hecho, en el coche que iban hay impactos de bala o de balín y tiene evidentes signos de haber sido tiroteado.

A partir de ahora, según Caballero Salinas, “habrá que practicar una serie de pruebas cuando se vea en profundidad todo, el atestado y los diferentes datos indiciarios que puedan existir y se tratará de incidir en aquello que pueda no haberse valorado correctamente o que se pueda ampliar la información”. Sobre el arma de la que pudieron partir los tiros, según el letrado “se hizo una entrada de registro en el domicilio de los investigados y no ha aparecido, mientras que la parte contraria sí que tiene armas”, ha dicho.

Los jóvenes detenidos han sido trasladados a dependencias policiales de Cieza y de ahí se trasladaran a la cárcel de Sangonera.