A falta de la autopsia que confirme la identidad, todos los indicios conducen al ciudadano desaparecido hace casi dos meses
M.C.C.Vera
La Guardia Civil ha recuperado esta mañana un cadáver del fondo de un pozo en un paraje situado en el Término de Arriba de Jumilla. Según explicaron fuentes cercanas a la investigación, el Instituto Armado investiga ahora si el cuerpo corresponde a Diakina Fofana, un ciudadano de Mali que se encontraba desaparecido desde el pasado 2 de septiembre.
Los investigadores de la Policía Judicial ya han detenido a un sospechoso que, según explicaron las fuentes, habría confesado el crimen y conducido a los agentes hasta la localización del pozo.
Agentes del grupo de especialistas en actividades subacuáticas (GEAS) del Instituto Armado se desplazaron, junto al grupo de Montaña de la Benemérita, a Jumilla para recuperar el cuerpo, que estaba siendo custodiado por una pareja de agentes desde que fue localizado, en la noche del martes. El cuerpo fue trasladado al Instituto de Medicina Legal (IML), donde la autopsia deberá determinar si se trata de Diakina Fofana, así como las circunstancias que han rodeado su muerte que, según los primeros indicios, no se produjo por causas naturales.
Compatriotas solicitaban colaboración ciudadana para encontrarlo
Diakina Fofana, de 43 años, se encontraba desaparecido desde el pasado 2 de septiembre, unos días después de regresar de Malí, su país de origen, donde fue a visitar a su familia. Su coche apareció aparcado en una calle la localidad, mientras que su documentación se localizó en Hellín, donde trabajaba.
A principios del mes de octubre, cerca de 300 personas asistieron a una concentración convocada por paisanos y amigos del desaparecido que solicitaban la colaboración ciudadana de todo el pueblo de Jumilla para localizar lo antes posible a su compatriota.
Testimonio de un amigo
Mary Culibaly es uno de los amigos de Fofana y que, en este tiempo, ha actuado como portavoz. Una vez que saltaron las primeras noticias, comenzó a recibir llamadas por parte de otros compatriotas. De esta forma, a mediodía, una vez que terminó de trabajar, se dirigió al cuartel de la Guardia Civil de Jumilla para cerciorarse de las informaciones que estaba recibiendo.
Según ha declarado Mary Culibaly a esta redacción, los agentes de la benemérita le confirmaron que sí se trataba de su amigo, aunque debía esperar a los resultados de la autopsia. Culibaly se ha mostrado muy apenado y no se explica lo sucedido ya que, según asegura, “Diakina Fofana era una buena persona”, como también afirmaban sus conocidos, en la concentración, que lo calificaron de “trabajador, sin vicios y apartado de problemas”.
