Entre las diferencias del fútbol en las Antípodas resalta que hay aficiones más respetuosas y ausencia de racismo
Desde 2013 reside en Australia donde ha dirigido multitud de partidos, alcanzando la NPL, segunda categoría del sistema de ligas de este país. En España llegó a ser linier en Segunda B
Reportaje de J. J. Melero
Tras dos décadas en el mundo del arbitraje, el jumillano Isidro Terol Crespo cuelga el silbato. No uno cualquiera, sino un silbato que ha cruzado el mundo para pitar a 17.600 kilómetros de distancia en un país 16 veces más grande que España, aunque con la mitad de habitantes.

Ha tenido la suerte de pitar a alto nivel. Desde 2013 ha estado dirigiendo multitud de partidos en Australia, alcanzando la National Premier League, que es la segunda categoría del sistema de ligas de fútbol del país de las Antípodas.
No lo deja por edad, ya que apenas tiene 35 años. Se retira del arbitraje para disfrutar más de la familia, según él mismo confiesa sin tapujos: “Compaginar el trabajo con los partidos suponía estar ocupado los siete días de la semana porque aquí el arbitraje está mucho menos profesionalizado que en España”.

Cuando llegó, hace ahora 12 años, tuvo que empezar desde la categoría más baja por problemas de idioma, pero su buen hacer le llevó hasta la NPL donde ha dirigido varias finales y partidos de alto voltaje. En este tiempo ha tenido como compañeros, entre otros, a árbitros del nivel de los que dirigieron la final del último Mundial de Clubes.
Antes, en España, había arbitrado durante casi una década, llegando a dirigir partidos en Tercera División o a actuar como juez de línea en encuentros de Segunda B.

Pero con 22 años, una decisión cambiaría su vida. Se fue a Australia a aprender inglés para tres meses. Pero allí se quedó, formó su propia familia y hoy, 12 años después, gestiona una empresa de tintado de lunas de vehículos, comercios y viviendas.
Como diferencias entre el fútbol de un país y otro resalta que “en Australia la afición es más respetuosa y no existen problemas de racismo”. Entre las anécdotas recuerda entre risas la vez en la que todo el equipo arbitral acudió a un partido justo 24 horas antes de la fecha prevista. Ahora su largo viaje arbitral ha llegado a su fin. Jueguen.












