Los presupuestos municipales son sin lugar a dudas el documento más importante para la Administración local. De hecho, cada año marca las inversiones, la oferta de empleo público, los dineros con los que se va a contar para las fiestas, si va a haber subvenciones o no y en definitiva, son un indicador claro de por dónde van a ir los tiros durante los próximos cuatro meses.
El pasado martes, el equipo de Gobierno local, presentó el borrador del presupuesto para el ejercicio 2016. De esta manera, tanto la alcaldesa como el concejal de Hacienda, explicaron las principales novedades, se mostraron ilusionados, ya que no hay que olvidar que son los primeros que presentan y en él se encierran muchos de los grandes proyectos e iniciativas de las diferentes concejalías, y sobre todo, resaltaron su predisposición a atender las sugerencias, ideas y enmiendas tanto del PP como de IU-Verdes. En este sentido, es que hay que tener muy presente que eso de encender el rodillo y sálvese quien pueda ya no cabe en esta legislatura, por lo que presentar cientos de enmiendas y ser rechazadas todas, no ocurrirá casi con total seguridad, por lo que habrá que atender a los intereses y aportaciones de las bancadas opositoras.
En la pasada legislatura, el PP presentó sus presupuestos, marcados los últimos por los famosos tres millones de euros de la privatización de la basura y limpieza viaria, que al finas sólo le sirvió como cajón de desastre de dónde poder tirar cada vez que quería hacer algo que no estaba presupuestado. En este sentido, ni qué decir tiene que ahora esos 500 millones de pesetas ya no están en partida alguna, por lo que el reparto se ha hecho de otra forma, como es normal, logrando un presupuesto donde se recuperan las subvenciones, las inversiones llegan hasta el 1’8 millones de euros y no solo para hacer nichos, y se apuesta por modernizar la administración, el parque móvil y tocar todo aquello que no ha sido tocado por sus antecesores.
En fin que ahora toca hacer algo que quizá alguno ni se acuerde como se hace, que es dialogar, con el objetivo de que Jumilla tenga un presupuesto de todos y para todos, sin politiqueos.