Ayer se conmemoraba el Día Mundial Contra el Cáncer de Mama, y aunque parezca un típico tópico que se repite con carácter anual, lo cierto es que no podemos dejar de realizar un alto en el camino, y reflexionar acerca de los datos que arroja esta enfermedad, la incidencia y lo que está en nuestra mano hacer para evitar en lo posible pasar por este trance.
El cáncer de mama es el tumor más frecuente en las mujeres occidentales, y en nuestro país se diagnostican alrededor de 26.000 nuevos casos al año, así que 1 de cada 8 mujeres tendrá cáncer de mama a lo largo de su vida. Cada día son diagnosticados 44 nuevos casos de cáncer de mama, lo que convierte a esta enfermedad en la primera causa de mortalidad femenina. La mayoría de los casos se diagnostican entre los 35 y los 80 años, con un máximo entre los 45 y los 65. Sin embargo, según los expertos, esta es una de las pocas enfermedades cancerosas que se pueden detectar en su fase inicial. Su diagnóstico precoz aumenta las posibilidades de curación, permite la aplicación de tratamientos menos agresivos y favorece una cirugía mínimamente invasiva.
El cáncer de mama no se puede prevenir, pero estudios recientes demuestran que el riesgo de padecer cáncer de mama se puede reducir realizando ejercicio físico de forma regular, evitar el sobrepeso y la obesidad tras la menopausia y el consumo regular de alcohol. Se habla igualmente de que los tratamientos hormonales sustitutivos en la menopausia, coinciden según estudios epidemiológicos, con un incremento de riesgo de padecer este tipo de cáncer, así que sería recomendable, no acogernos a ninguno de ellos.
Pero lo verdaderamente importante es la detección precoz, ya que las posibilidades de curación de los cánceres de mama que se detectan en su etapa inicial son prácticamente del 100% y la técnica utilizada más eficaz es la mamografía, que permite detectar lesiones en la mama hasta dos años antes de que sean palpables y cuando todavía no han invadido en profundidad ni se han diseminado a los ganglios ni a otros órganos. ¡Súmate al rosa tú también!