Inmaculada González Montoya pregona la Navidad de 2021 en San Juan
Lola Tomás
Inmaculada González Montoya, hermana de La Samaritana y secretaria de la Junta Central de Hermandades de Semana Santa, ha pregonado la Navidad, y lo ha hecho con ilusión, vida, alegría, paz, brillo, esperanza, y pasión, a lo que ha unido el canto de villancicos, en una iglesia de San Juan plena, en el tercer domingo de adviento.
Pregón
“Entre las nubes de Santa Ana se oyen canciones…” así comenzaba el pregón, seguido de un villancico y saludando especialmente al cura párroco de San Juan, José Andrés Alcolea, a la alcaldesa Juana Guardiola y al presidente de la Asociación Belenista Francisco Jiménez, a familiares, amigos y resto de presentes que tras la misa, permanecieron.
Como si de una reunión familiar se tratara, Inmaculada González, aludió a la Navidad como “la única verdad”, recordando que su Navidad “e un salón repleto de familia y amigos, entonando los rigores de la noche fría”.
“Así es mi Nochebuena en Navidad, en mis dos casas compartidas, la de mi madre y la de mi suegra, entre luces, belenes y villancicos que nos gustan trasmitir a nuestros hijos como un legado que no debemos olvidar”, contaba emocionada.
“La Navidad nos encanta y nos conmueve, nos recuerda a nosotros mismos, a los valores, a lo que realmente cuenta y que perdemos de vista inmersos en la vida diaria”.
La pregonera contó a los presentes que desde hace unos años el día 22 de noviembre, festividad de Santa Cecilia patrona de la música, “se le mostró” el camino de la palabra, de Dios, de la devoción, insistiendo además en que para ella, ese día “es mágico”.
“Es un día lleno de ángeles que velan por nosotros y en ocasiones nos llevan con ellos, y ese día hace años, se llevaron parte de mi corazón, y ese día…” que fue cuando comenzó a escribir, “… ese día me mostró parte de este pregón”.
“La Navidad es ilusión, seguía declamando la samaritana, es la alegría de anunciar la vida, la que está por llegar y la vivida. No basta con verla, hay que entrar en ella, decía, y mostrarle a Jesús lo que realmente somos”.
“La Navidad es divina y es el momento más significativo y álgido del calendario cristiano”.
Inmaculada González Montoya apelaba tras lo litúrgico del término Navidad, al nivel familiar de la celebración, que hiló con el nacimiento de Cristo, el Señor, “como anuncio de sentimientos de felicidad que aplicamos a los instantes compartidos”.
“Vida es Navidad. Olor de hogar, sabor de tradición, el sonido del amor, el sentimiento de paz, el color de la amistad…, el olor a la lumbre de la casa de mi abuela ya por el jardín de las Ranas, es el color plomizo del atardecer en Jumilla que invita a pasarla en familia”.
La pregonera se detiene en su declamación y canta un villancico, “Dame el aguilando”. Y sigue pregonando, “… surge la belleza, el misterio de la Navidad que desvelamos cada uno de nosotros con sus vivencias”
“Navidad es brillo, el de la luz, las estrellas, el de los Reyes que llegarán…”
“Soñar, rememorar cenas de Navidad, el Belén Viviente, el que mejor pude contemplar, repleto de amistad, de Jóvenes Cofrades…” y canta de nuevo otro villancico, “Entre un buey y una mula, Dios ha nacido…”.
Y se detiene en el Belén Viviente, y recorre las diferentes estampas que lo componen y se para en el nacimiento, en el gran Ángel protector, en la estrella dorada que representa “la noche de los sueños”, y los Reyes Magos, con su oro, incienso y mirra, y las cartas…
Y recuerda en ese instante la carta de los jumillanos a Sus Majestades, en alusión al pregón de uno de sus predecesores, Juan Francisco Martínez, “todos pedís lo mismo, os llevaremos felicidad, pero no la guardéis escondida”, decía entonces el pregonero.
Y vuelve a cantar ahora “Ya vienen los Reyes…”, y avisa casi finalizando que la Navidad “es el acto de amor más intenso de Dios por sus hijos”.
“Hay que abrazar la Navidad, vivirla, disfrutarla y sobre todo, abrazar su verdad”.
Cierre
El presidente de los Belenistas entregó el pin de la asociación y un detalle a la pregonera “por su atrevido, alegre, creativo e interactivo pregón” y obsequió también a la presentadora de la pregonera, Carmen Abellán Risueño, amiga personal de Inmaculada González.
En el acto del pregón intervino un grupo de clarinetes de la Asociación Musical Julián Santos.
