El FC Cartagena tuvo las mejores ocasiones pero no consiguió poner freno a la buena racha de resultados del FC Jumilla, que es ya de seis partidos sin perder.
Empate a cero en el derbi regional disputado ayer en el Municipal de La Hoya que permite a los vinícolas continuar en los puestos de permanencia con 29 puntos.
Tras la polémica suscitada entre la directiva y Josico, que la semana pasada fue sancionado un mes de empleo y sueldo, el entrenador manchego vio el partido desde la grada. Las decisiones técnicas las tomaron el italiano Gianluca Castellano, que estuvo en el banquillo en calidad de delegado, y Paco Pliego, que no pudo sentarse y daba las órdenes desde el túnel de vestuarios.
Sobre el campo el dominio del esférico era alterno pero el peligro siempre llegaba del lado visitante. Luis Verdú tuvo que sacar un balón bajo la línea de gol y Fran Manzanara hacía lo propio desviando de cabeza un remate que iba directo a las mallas. La férrea defensa mantenía a los vinícolas en el partido, que únicamente a balón parado pudieron inquietar la portería rival.
El francés Evans Kondogbiá jugó de titular por primera vez esta temporada. Aunque se le vio intención estuvo pasado de revoluciones, y solo la benevolencia del árbitro permitió que no acabara en vestuarios antes del descanso. El danés Christensen le sustituyó al poco de la reanudación ante la seria amenaza de que el equipo se quedara con diez jugadores. Con el cambio el FC Jumilla mejoró y el juego ganó en fluidez. Los jugadores se asociaban con posesiones largas y la presencia vinícola en campo contrario se hacía más evidente con el paso de los minutos, pero dentro del área el peligro se difuminaba para quedar en nada. Muy cerca del final fue el cartagenero Chus Hevia el que pudo decantar el partido, pero su remate se marchó fuera cuando se encontraba solo en el área pequeña y con la portería vacía.
El pitido final fue bien recibido en el Municipal de La Hoya, que celebró el punto como si de una victoria se tratase. Menos mal, porque una derrota hubiese desestabilizado aún más a un equipo que esta temporada no gana para disgustos fuera de los terrenos de juego.